Recetas deliciosas para mantener la piel saludable
La avena y el salmón son dos alimentos que nutren el organismo —por dentro y por fuera—
Para disimular las canas, puedes teñirte el cabello.
Para aplanar el vientre, puedes modelarlo con un par de Spanx.
Sin embargo, a no ser que te sometas a un procedimiento médico grave, no puedes hacer mucho para disimular las arrugas. Por eso el cuidado preventivo de la piel es tan importante. Por las mañanas y noches aplico en mi rostro un suero regenerativo y una crema humectante contra el envejecimiento, pero también intento comer inteligentemente. A continuación brindo dos maravillosas recetas que incorporan alimentos que son buenos para la piel.
Es por algo que fabrican lociones y jabones de avena: nutre la piel. Yo disfruto de la avena todo el año; ahora que las mañanas son más frescas, me he olvidado de las mezclas de cereales a base de avena con frutas de verano y yogur griego y desayuno con avena caliente con frutas secas y nueces.
Puedes seguir las instrucciones en el paquete de avena, pero solo se necesita un minuto para ascender este cereal de fiable a delicioso. Solo agrégale calabaza enlatada y un poquito de especias para tarta de calabaza. Entonces rocíalo con sirope de arce y agrega unas cuantas nueces (que también son buenas para la piel). Si en lugar de leche de vaca usas leche de soya con regularidad, podrías notar que las manchas oscuras de la piel se te están aclarando: estudios sugieren que los minerales y las proteínas que aporta la soya podrían hacerles perder su intensidad.
El salmón, con los ácidos grasos omega 3 que aporta, es uno de los mejores alimentos para mantener la piel hidratada y suave. Para crear el trío perfecto para el cuidado de la piel, empareja el salmón con la fuerte y saludable salsa de espinaca (que también aporta ácidos grasos omega 3) de esta receta y sírvelo con tomates cereza salteados; estos últimos son una de las mejores fuentes de licopeno, un antioxidante que protege contra el envejecimiento.
Me tiño el cabello. Tengo por lo menos tres pares de Spanx. Pero a la hora de mantener mi piel saludable, confío en la cocina.
Avena con calabaza, nueces y arándanos rojos secos
Rinde 4 porciones
Para elaborar un budín con restos de avena, calienta 2 tazas de avena cocida sobrante con 2 tazas de leche de soya. Hierve a fuego lento hasta que se espese, revolviendo con frecuencia —unos 20 minutos—. Vierte la avena en tacitas para natilla y refrigéralas hasta que llegue la hora de servirlas. Endúlzalas con sirope de arce o azúcar morena.
- 3 1/2 tazas de leche de soya con sabor a vainilla
- 1 taza compacta de calabaza pura
- 2 tazas de avena tradicional
- 1 1/2 cucharaditas de especias para tarta de calabaza
- 1 pizca de sal
- 1/4 taza de cada uno: nueces tostadas picadas y arándanos rojos secos
En una olla grande u olla de hierro fundido con una capacidad de 5 a 6 cuartos, cocina a fuego medio-alto la mezcla de la leche, calabaza, avena, especias y sal hasta que entre en ebullición. Baja el fuego a medio-bajo y cocina, revolviendo de vez en cuando, hasta que se espese —unos 5 a 10 minutos, según gustes y la marca de la avena—. Agrega a cada porción las nueces y arándanos rojos secos y sirve.
Salmón sellado con salsa "holandesa" de espinaca
Rinde 4 porciones
Sirve este salmón sellado y salsa de espinaca con tomates cereza salteados.
- 2 cucharadas de aceite de oliva, divididas
- 2 dientes de ajo picados
- 8 onzas de espinaca tierna lavada en la fábrica
- Sal y pimienta negra molida
- Una pizca de hojuelas de pimienta roja picante
- 1 cucharadita de jugo fresco de limón
- 4 filetes de salmón de corte central (de 5 onzas cada uno)
En una sartén grande antiadherente y pesada coloca 1 cucharada de aceite, el ajo, la espinaca y las hojuelas de pimienta roja y sazona ligeramente con sal y pimenta. Tapa y cocina al vapor a fuego medio-alto hasta que la espinaca se haya marchitado y vuelto un color verde vivo, unos 4 a 5 minutos. Traslada la espinaca a una licuadora y mezcla hasta lograr un puré. Agrega el jugo de limón y revuelve; mantén la salsa caliente.
Mientras tanto, limpia la sartén con un trapo o toallita y vuelve a calentarla a fuego medio-alto fuerte. Coloca los filetes de salmón en un plato y rocíalos con la cucharada de aceite restante. Voltea los filetes para cubrirlos por los dos lados, entonces sazona con sal y pimienta.
Coloca los filetes de salmón en la sartén, con el lado de la carne hacia abajo. Cocina a fuego alto hasta que se doren bien, uniformemente, unos 3 a 3 1/2 minutos. Voltea los filetes de salmón y cocina hasta que el lado de la piel se dore de igual forma —3 a 4 minutos adicionales para que queden término medio, 4 a 5 minutos adicionales si los deseas un poco más cocidos—. Traslada los filetes a platos, aderézalos con la salsa y sirve inmediatamente.
Pam Anderson es autora de un libro de cocina con gran éxito de ventas, popular colaboradora del blog threemanycooks.com y experta en gastronomía de AARP, donde escribe dos veces por mes.
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