Gilberto Santa Rosa: 10 discos que marcaron época
El caballero de la salsa brilla en estas producciones.
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‘Borinquen Flame’ — Mario Ortiz & His Salsemble
El caballero de la salsa tiene solamente 15 años cuando participa en un disco por primera vez. Gilberto Santa Rosa comparte la voz principal con Paquito Álvarez en Borinquen Flame, excelente trabajo del trompetista Mario Ortiz con un conjunto rústico y afilado que incluye a René Hernández en el piano. Gilbertico inclusive contribuye un tema de su autoría: “Regálame tu amor”. Continuaría fogueándose en los estudios de grabación con notables agrupaciones como la Puerto Rico All Stars y la orquesta de Tommy Olivencia.
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‘The Salsa Machine’ — Willie Rosario
A principios de los años 80, Santa Rosa da un paso gigantesco hacia su consagración artística: cantar junto a la orquesta del timbalero Willie Rosario, veterano de la salsa e innovador de una explosiva instrumentación que incluye cuatro trompetas y saxo barítono. Acompañado por otra futura estrella —un joven Tony Vega— el cantante graba seis discos con Rosario, coqueteando con la salsa romántica pero preservando la esencia aguerrida de la estética tropical. The Salsa Machine es el mejor momento de esta etapa.
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‘Good Vibrations’
El debut de Santa Rosa como solista llega en 1986 con este sabroso LP patrocinado por el tecladista Rafael Ithier y editado por la disquera del Gran Combo. Lejos todavía del sonido suntuoso que el cantante desarrollaría durante las próximas décadas, Good Vibrations se apoya en las raíces de la salsa puertorriqueña, con éxitos como “Sin un amor” y “Cantante de cartel”, con el majestuoso saxo barítono que encontramos en los discos de Willie Rosario. Un primer disco impecable, con Tony Vega en los coros.
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‘A Dos Tiempos De Un Tiempo’
En 1992, Santa Rosa decide grabar un disco entero en homenaje a Tito Rodríguez, el sonero puertorriqueño que tuvo una influencia total en su carrera. Demostrando ser un genuino fanático de Rodríguez, Gilberto explora no solo su faceta como bolerista (“Monólogo” revela ciertos dejos de balada latina que aparecerían en el futuro), sino también su lado guarachero, con vibrantes versiones de “El que se fue”, “Mama Güela” y “Cuando, cuando”, evocando a la perfección el swing de las grabaciones originales.
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Cortesía de Sony Music Latin
‘En Vivo Desde El Carnegie Hall’
Habiendo conquistado el cariño del público latino en Estados Unidos, Santa Rosa se presenta por primera vez en el Carnegie Hall en 1995 y edita un compacto doble documentando este recital. Acompañado de una sólida orquesta tropical con el agregado de una sección de cuerdas, interpreta éxitos definitivos de su carrera como “Vivir sin ella” y “Perdóname”. Siempre fiel a su origen puertorriqueño, concluye la grabación con “Amanecer borincano” y un exuberante popurrí de plenas, la emoción palpable en su voz.
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Cortesía de Sony Music Latin
‘Expresión’
Editado en 1999, Expresión ejemplifica el estilo que haría de Santa Rosa uno de los cantantes tropicales más populares del nuevo milenio. Por un lado, se mantiene fiel a los parámetros bailables de la salsa contemporánea. Al mismo tiempo, su facilidad con las baladas se hace ver en muchas introducciones de canciones como el éxito “Que alguien me diga”. Con su ritmo frenético y dejos de calipso, el tema de apertura, “Déjate querer”, se transformaría en uno de los momentos claves de su repertorio.
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Cortesía de Sony Music Latin
‘Intenso’
Si los comienzos de la salsa se nutrieron generosamente del jazz y sus texturas, este elemento permanece vivo en la orquestación de Santa Rosa mediante el tratamiento de los metales. El disco preferido del cantante, Intenso (2001), es un título que describe el profesionalismo de su protagonista, además de incluir grandes temas como “La agarro bajando”, que usan elementos románticos para después generar vértigo bailable con sus coros arrebatados. Otras canciones como “Pero no me ama” y “Pueden decir” son igualmente recomendables.
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Cortesía de Sony Music Latin
‘Contraste’
El concepto mismo de Contraste (2007) explica las razones por las que Santa Rosa es popular también en países donde la salsa no goza de gran aceptación. El disco doble contiene una primera parte de canciones salseras y una segunda que reproduce prácticamente el mismo repertorio, pero en versiones de balada pop. El tema de apertura, “Conteo regresivo”, conecta con un sonido más suave. Por momentos, Santa Rosa adopta la estética de un cantante de música pop, sólo que dentro de un marco caribeño.
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‘Una Navidad con Gilberto’
Continuando la tradición de salseros que graban LPs navideños, en 2008 Santa Rosa regresa a sus raíces con un excepcional disco de material bailable para las fiestas. Secundado por Víctor Manuelle, que contribuye el tema “La Navidad más larga” y Jerry Rivas de El Gran Combo, entre otros, el cantante capta la alegría contagiosa de las viejas épocas de la salsa boricua. Se destaca “La fiesta no es para feos”, en el que Gilbertico enumera cariñosamente a todos los colegas cantantes que quedarían afuera de esta fiesta imaginaria.
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Cortesía de Sony Music Latin
‘Irrepetible’
En el 2010, Santa Rosa decide expandir sus horizontes musicales, iniciando una serie de discos que coquetean abiertamente con otros estilos. Irrepetible incluye memorables dúos como “Me cambiaron las preguntas”, colaboración con el panameño Rubén Blades y la primera incursión de Gilbertico en letras de temática social. El maestro merenguero Johnny Ventura y el grupo de fusión venezolano Guaco son otros invitados de lujo en un disco que no tiene desperdicio.
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