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Ahora, para mi próximo capítulo... un cambio de profesión

Desde entidades sin fines de lucro hasta programas de transición de Fortune 500, hay muchos cambios de profesión posibles.

Keith Gordon a los 61 no se retiró y cambió su carrera a ser profesor de matemáticas.

Poon Watchara-Amphaiwan

Keith Gordon, de 61años, omitió la jubilación para convertirse en maestro de matemáticas.

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De ingeniero a maestro

Keith Gordon

Dio el salto: A los 61 años

Profesión anterior: Ingeniero de sistemas

Nueva profesión: Maestro de matemáticas de escuela secundaria

Programa: Programa de IBM de transición a la enseñanza

Hoy, como maestro de matemáticas de Maryland recién estrenado, Keith Gordon pasa su tiempo instruyendo a adolescentes. La reinvención de Gordon llegó por cortesía de su empleador (en inglés), IBM. Pensaba jubilarse a los 66 años. Entonces se interesó por el programa de transición a la enseñanza (Transition to Teaching) de la compañía, que ayuda a los trabajadores de larga data en la empresa y que se encuentran próximos a jubilarse a incursionar en segundas carreras como maestros de matemáticas o ciencias.

Los trabajadores que resultan elegibles reciben hasta $15,000 para ganarse un diploma de maestro mientras, como estudiantes, realizan las prácticas correspondientes. Gordon dice que no lo hubiera considerado sin la ayuda de IBM. “Ahora pienso que a los 66 años se es muy joven. Puedo imaginarme, fácilmente, enseñando bien pasada esa edad”. —Carole Fleck

Beverly Robinson reinventó su carrera en una granja de cabras en Soperton, Georgia.

Poon Watchara-Amphaiwan

Beverly Robinson, de 57 años, utilizó sus ahorros para pasar a formar parte del creciente grupo de granjeros mayores de 50 años.

De rectora universitaria a granjera

Beverly Robinson

Dio el salto: A los 57 años

Profesión anterior: Rectora universitaria

Nueva profesión: Criadora de cabras

Programa: Asistencia técnica del gobierno

Beverly Robinson recurrió a sus ahorros para poder dedicarse a criar cabras en una sección de los 22 acres de extensión de su hacienda, en Soperton, Georgia. Dice que quería retornar al estilo de vida que ella conoce. “Nuestra familia ha estado en esa zona por tres generaciones, y crecí rodeada de muchísimos animales”, agrega. Para arrancar, recibió una subvención de asistencia técnica —para la instalación de un pozo de agua, potreros y un sistema de riego— del servicio federal de conservación de los recursos naturales (Natural Resources Conservation Service).

Muchos de sus nuevos colegas granjeros hoy tienen más de 50 años. De los más de 522,000 granjeros con 10 o menos años en la actividad —considerados principiantes por el gobierno—, alrededor de la mitad son mayores de 50 años. Robinson, cuyas ganancias ahora se expresan en cuatro dígitos, aconseja a los potenciales granjeros que elaboren y redacten un plan de negocio detallado y dediquen tanto tiempo al mercadeo como a cosechar. —David Wallis

Kate Young a los 67 tomó un gran paso en la agricultura sostenible para ayudar a mujeres jóvenes en Guatemala.

Poon Watchara-Amphaiwan

Kate Young, de 67 años, dio un gran paso hacia la agricultura sustentable, ayudando a mujeres jóvenes en Guatemala a comprender la importancia de la nutrición.

De directora a voluntaria

Kate Young

Dio el salto: A los 67 años

Profesión anterior: Directora de una organización sin fines de lucro

Nueva profesión: Especialista en agricultura sustentable

Programa: Cuerpo de Paz (Peace Corps)

El problema de Kate Young era típico: agotamiento boomer. Pasó la última década dirigiendo una entidad sin fines de lucro que apoya a familias menos favorecidas en Durham County, Carolina del Norte. Los enormes esfuerzos para recaudar fondos a fin de mantener el centro en funcionamiento y las exigencias propias de su labor casi acaban con ella.

Entonces Young siguió las huellas de otros miles de boomers que se rehusaron a jubilarse y pasar a llevar una vida ociosa. Se unió al Cuerpo de Paz. Algunos aprovechan su servicio para obtener nuevos conocimientos y experiencia que puedan transferir a su próxima profesión. Los voluntarios también ganan un salario, que cubre su alojamiento, alimentación y otras necesidades. En Guatemala, Young ha ayudado a pequeños grupos de mujeres a aprender sobre nutrición. Dice que planea involucrarse en la agricultura sustentable en EE.UU. trabajando en comunidades desatendidas para inaugurar huertas comunitarias. “Fue un gran y aterrador paso, pero, hasta el momento, ha resultado una travesía maravillosa y gratificante”, señala. —Carole Fleck.

Noel Durrant a los 59 educa en el uso de la tecnología a profesores en países en vía de desarrollo.

Poon Watchara-Amphaiwan

Noel Durrant, de 59 años, enseña cómo usar la tecnología a maestros de países en vías de desarrollo.

De gerente a educador

Noel Durrant

Dio el salto: A los 59 años

Profesión anterior: Director de un programa de calidad y fiabilidad

Nueva profesión: Educador en materia de tecnología

Programa: Beca Intel Encore

Noel Durrant enciende alegremente su laptop y les muestra a curiosos maestros en Kenia cómo usar la tecnología en el aula. Inicialmente, Durrant pensó que se jubilaría en alrededor de un año. En vez de ello, hace poco viajó al otro lado del mundo para ayudar a que las personas "enloquezcan" por aprender lo que las computadoras pueden hacer.

“Aproveché mi jubilación para iniciar una nueva carrera, y estoy trabajando muchísimo”, asegura Durrant, quien se jubiló en diciembre del 2013 luego de trabajar 26 años para Intel, el fabricante de chips de computación. Ahora trabaja para Team 4Tech, una organización sin fines de lucro que ayuda a mejorar la educación en países en vías de desarrollo mediante tecnología innovadora. El programa de Intel, sumado a un estipendio de $25,000, posibilitó que Durrant y otros 200 empleados de larga data de Intel data se asocien con organizaciones sin fines de lucro locales, aplicando sus conocimientos y experiencia a nuevas finalidades. —Carole Fleck

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