Vida Sana
Cuando se trata de tener una huerta en casa, primero hay que pensar en el tiempo que tenemos para cuidarla y mantenerla. Aquí te presento las hortalizas y verduras más fáciles de cultivar.
Ejotes o frijoles verdes
Planta la semilla en la tierra cuando la temperatura del suelo haya alcanzado al menos los 60° F (15.5° C). El suelo debe estar bien aireado, tener buen drenaje y ser rico en material orgánico. Distribuye las semillas en hileras de una pulgada de profundidad y deja un espacio de unas 3 pulgadas (7,5 cm) entre cada semilla. Sabrás que están listos los frijoles cuando estén todavía tiernos y se partan fácilmente por la mitad. Crecen muy bien cuando están plantados al lado del maíz y las calabazas.
Lechuga
Hay muchas variedades de lechuga, pero las más comunes (romana, mantecosa, iceberg, entre otras) son muy fáciles de plantar y cosechar tanto en la huerta como en macetas grandes. Estas semillas prefieren los climas más frescos y el mejor momento de plantarlas suele ser cuatro o seis semanas antes de que empiece el calor más intenso. Planta unas 10 semillas por cada pie cuadrado en hileras, dejando una separación de 12 pulgadas (30 cm) entre ellas. Cuando riegues, ten cuidado de que el suelo no quede demasiado empapado y cosecha las lechugas cuando las hojas estén todavía tiernas para evitar que se amarguen.
Rábano
Pocas verduras son tan sencillas de plantar y cosechar como el rábano y, ¡pocas crecen tan rápido! Puedes plantarlo tanto en la huerta como en una maceta de unas 6 pulgadas (15 cm) de profundidad. Crece bien al sol o en la semisombra y realmente lo único que necesita es que lo rieguen regularmente para que no se seque la tierra. Cuando esté listo para la cosecha, saca los rábanos de la tierra y usa un cuchillo para cortar las hojas. Si los guardas en el refrigerador, durarán dos o tres semanas. Además de añadirlos a tus ensaladas o usarlos para adornar tus platos de verano, prueba asarlos con un poco de aceite de oliva y sal.
Tomates cherry
Estos pequeños y deliciosos tomates son ideales para plantarlos en una maceta, aunque también puedes sembrarlos fácilmente en un lugar de la huerta que reciba por lo menos seis horas de sol al día. Planta los tomates pasada la última helada en el área donde vives y, con regarlos regularmente y ponerles abono orgánico cada dos semanas, podrás disfrutarlos en tu mesa dentro de un lapso de 80 días desde la siembra. Esta variedad de tomates se produce en abundancia, así que con un par de plantas tendrás suficiente para toda la temporada.
Pimientos
Imprescindibles en nuestra cocina latina, estos sabrosos pimientos necesitan poco más que abundante sol y suficiente agua para mantener la tierra húmeda aunque no encharcada. Dependiendo del tipo de pimiento que escojas plantar, suelen necesitar al menos 60 días para alcanzar la maduración. Mi consejo es que los plantes en macetas grandes con suficientes agujeros para asegurar un buen drenaje. Si vas a trasplantar los pimientos a tu huerta, te aconsejo hacerlo cuando la tierra esté lo suficientemente templada, entre 70° y 85° F (21-20 grados C).
Albahaca
Sin duda una de las hierbas más populares, es un ingrediente esencial en la cocina mediterránea, especialmente en la italiana. No le gusta el frío, así que plántala en la huerta cuando no haya ya riesgo de heladas. Puedes también plantar la semilla en una maceta o empezar con una planta pequeña y ponerla en un rincón soleado de la cocina para tener fácil acceso a sus deliciosas hojas. Si observas que la planta empieza a florecer, quita los pequeños capullos o flores blancas en cuanto salgan. La albahaca necesita sol y agua, así que recuerda regarla diariamente en el verano.