Ya sea un padre mayor que necesita ayuda o un hijo mayor que vive en casa, millones de personas de mediana edad brindan apoyo a familiares adultos. Eres extremadamente generoso si te encuentras entre las personas que ayudan a un ser querido que lo necesita. Sin embargo, esto podría ser económicamente difícil para ti en un momento en el que deberías ahorrar para tu propia jubilación, terminar de pagar tu hipoteca o crear un fondo de emergencia.
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Afortunadamente, hay un puñado de deducciones y créditos impositivos que pueden ayudar a aliviar la carga financiera de apoyar a otro adulto (que no sea tu cónyuge). Sin embargo, el adulto al que brindas apoyo debe calificar como tu “dependiente” para solicitar estas exenciones fiscales.
Hay varios requisitos que deben cumplirse para reclamar a un adulto como dependiente en tu declaración de impuestos. La relación que tienen contigo, dónde viven, cuánto apoyo proporcionas e incluso sus ingresos son factores para determinar si puedes reclamar a un adulto como tu dependiente a efectos fiscales. Pero si cumples con todos los requisitos, puedes reducir tu factura de impuestos en cientos —o incluso miles— de dólares.
Un dependiente puede ser un “hijo calificado” o un “familiar calificado”. Sin embargo, hay reglas diferentes para cada tipo de dependiente. Dado que los dependientes adultos generalmente se incluyen en la categoría de familiares calificados, me concentraré en los requisitos para ellos.
Debes satisfacer las siete “pruebas” a continuación para que un adulto sea considerado un familiar calificado. Si puedes marcar las siete cajas, el adulto al que estás ayudando puede ser reclamado como dependiente en tu declaración de impuestos.
1. Prueba del contribuyente dependiente
Para pasar esta prueba, no se te puede reclamar como dependiente en la declaración de impuestos de otra persona. Si estás casado y presentas una declaración de impuestos conjunta, tu cónyuge tampoco puede ser dependiente de otra persona.
Hay una excepción. Todavía puedes pasar la prueba si la persona que puede reclamarte (o a tu cónyuge) como dependiente presenta una declaración de impuestos únicamente para obtener un reembolso de los impuestos retenidos o estimados pagados durante el año fiscal.
2. Prueba de declaración conjunta
Por lo general, puedes marcar esta casilla si el adulto al que estás manteniendo selecciona algún estado en su declaración de impuestos que no sea “casado que presenta una declaración conjunta”.
Sin embargo, este requisito se cumple si se presenta una declaración conjunta únicamente con el propósito de reclamar un reembolso de impuestos pagados o retenidos.
3. Prueba de ciudadano o residente
Despejarás este obstáculo si el adulto que estás apoyando es ciudadano de Estados Unidos, extranjero residente de Estados Unidos, nacional de Estados Unidos, o residente de Canadá o México.
Un extranjero residente es alguien que:
- Es residente legal y permanente de EE.UU. bajo las leyes de inmigración del país en cualquier momento durante el año fiscal en cuestión, siempre y cuando este estatus no se haya revocado o determinado que ha sido abandonado.
- Ha estado presente físicamente en Estados Unidos por lo menos 31 días durante el año fiscal, y 183 días durante el período de tres años que incluye el año fiscal y los dos años inmediatamente anteriores.
- Un nacional de Estados Unidos es alguien que no es ciudadano estadounidense, pero que juró lealtad a Estados Unidos (por ejemplo, los samoanos estadounidenses y los residentes de las Islas Marianas del Norte que optaron por convertirse en nacionales de Estados Unidos en lugar de ciudadanos estadounidenses).
4. Prueba del hijo calificado
Si bien un familiar que reúna los requisitos puede ser de cualquier edad, la persona no se puede considerar un familiar calificado si también puede ser reclamado como hijo calificado ya sea por ti o por cualquier otra persona.
Una persona es tu hijo calificado si se cumplen las tres primeras pruebas descritas anteriormente, y él o ella:
- Es tu hijo, hija, hijastro, menor en adopción temporal, hermano o hermana, medio hermano, media hermana, hermanastro, hermanastra o descendiente de cualquiera de estos familiares.
- Tiene 18 años o menos al final del año fiscal, 23 años o menos y es un estudiante al final del año fiscal, o cualquier edad si está total y permanentemente discapacitado.
- Vivió contigo durante más de la mitad del año fiscal.
- No proporcionó más de la mitad de su propio sustento para el año fiscal.
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