8 interacciones peligrosas de alimentos y medicamentos

Los alimentos no son inofensivos

In English | Un sorprendente 81% de los adultos entre 57 y 85 años toma por lo menos un medicamento recetado, de acuerdo a una investigación publicada en Gerontologist, y lo que comes y bebes puede afectar la manera en la que funcionan esos medicamentos. No te enteres de la manera más dura cuáles alimentos pueden prevenir que un medicamento sin receta o recetado funcione o exacerbe sus efectos secundarios.  En su lugar, averigua cuáles combinaciones deberás evitar, además de una combinación en particular que sí funciona bien.

¿Adiós, bananas?

Los inhibidores ACE como el captopril (Capoten), enalapril (Vasotec) y el lisinopril (Prinivil) pueden ser los mejores amigos de tu corazón ya que relajan los vasos sanguíneos para que la sangre fluya con más facilidad. También pueden incrementar la cantidad de potasio en el cuerpo y el exceso de potasio puede causar latidos del corazón irregulares o palpitaciones. Si estás tomando un inhibidor ACE, evita consumir grandes cantidades de alimentos ricos en potasio, tales como las bananas, naranjas y sustitutos de sal que contengan potasio.

Sin queso, por favor

El vino y la cerveza van perfectamente con los quesos añejados. Sin embargo, si estás tomando ciertos antidepresivos —específicamente los inhibidores de la monoaminoxidasa  (IMAOs) como la selegilina (Ensam)— necesitas evitar los tres. Razón: "Los alimentos que contienen levadura, así como aquellos que hayan sido añejados o fermentados pueden causar que la presión sanguínea se eleve", dice Bola Oyeyipo, una geriatra de San Antonio. "Y esto puede aumentar las posibilidades de sufrir un derrame".

No a los lácteos

Beber un vaso de leche todos los días puede ser bueno, pero tomarlo para ingerir una multivitamina con hierro o tu antibiótico (incluidas las tetraciclinas o fluoroquinolonas) realmente está contraindicado. He aquí por qué: "Cuando se ingieren en conjunto, los lácteos se enlazan al medicamento y forma lo que se llama un complejo", explica Oyeyipo. "No te hace daño, pero se absorbe menos cantidad de la vitamina o del antibiótico". Después de tomarte la píldora, espera dos horas antes de beber o comer productos lácteos.

Más vitamina D

Algunos anticonvulsivos, tales como la fenitoína (Dilantin, Phenytek), se recetan no solo para la epilepsia, sino también para pacientes que hayan sufrido una lesión cerebral como un accidente cerebrovascular. El problema es que estos fármacos limitan la absorción de la vitamina D y el calcio, nutrientes que son importantes para la salud ósea y son clave para evitar la osteoporosis en hombres y mujeres. Una solución: cuando tomes anticonvulsivos, asegúrate de tomar sol 10 minutos al día, toma un lácteo adecuado y consulta a un médico para ver si necesitas un suplemento, dice Burgin Ross, profesor asistente de nutrición en University of North Carolina en Greensboro.  

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¿Adiós a la toronja?

Media toronja es una forma excelente de empezar el día, a menos de que estés tomando una estatina para reducir el nivel de colesterol, tal como la atorvastatina (Lipitor) o simvastatina (Zocor). "Los pacientes deben evitar la toronja por completo cuando estén tomando estatinas porque acentúan los efectos secundarios del medicamento", afirma Oyeyipo. ¿Cuál es el efecto secundario más común? Dolores musculares. Sin embargo, las naranjas y los limones se pueden comer mientras se toman las estatinas.

Cuidado con los vegetales de hojas verdes

Si estás tomando el anticoagulante warfarina (Coumadin, Jantoven), tal vez te convenga controlar tu consumo de verduras de hoja verde oscuro. Este fármaco, que ayuda a prevenir la formación de coágulos, permite que la sangre fluya más fácilmente al bloquear la producción de la vitamina K en el hígado, la cual es esencial para la formación de coágulos. Pero los vegetales de hojas verdes, tales como la col rizada, las espinacas y las hojas de nabo son ricos en vitamina K. También son sanos, por lo que no los debes evitar por completo. En su lugar, cómelos en forma consistente: una o dos veces por semana, todas las semanas.

Acetaminofeno + Alcohol = Problemas

Si sufres de dolores musculares, dolores de cabeza o artritis, el acetaminofeno (Tylenol) probablemente sea tu analgésico por excelencia. Sin embargo, puede causar daños en el hígado, y la posibilidad de graves daños es mayor si consumes tres o más bebidas alcohólicas al día. Así que siéntete libre de tomar vino en la cena, pero sigue la regla del reencorchado y guarda la botella después de una o dos copas para evitar mayores tentaciones.

¿Alimentos grasos? En este caso, sí.

Cada regla tiene su excepción y esta es particularmente deliciosa. Al tomar medicamentos antimicóticos, como la griseofulvina (Grifulvin V, Gris-PEG) para combatir una infección por hongos en la piel, siéntete libre de pedir una hamburguesa y papas fritas. "Estos fármacos funcionan mejor cuando se toman con alimentos grasos", dice Oyeyipo. "Les digo a mis pacientes que coman algo realmente grasoso, así podrán absorber mejor el medicamento".

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