Enchiladas: Un plato rico en calcio, fibra, y vitaminas B
Prepare pollo para el relleno y chile ancho para la salsa.
La enchilada es uno de los platos mexicanos que más honor hace a la variedad culinaria de ese país; hay enchiladas con todo tipo de ingredientes y con una gran variedad de salsas.
Para preparar una buena salsa mexicana hay que usar los exquisitos chiles que se cultivan en diversas regiones de ese país. Y como si fuera poco, hay enchiladas que sólo se acompañan con frijoles o salsa blanca.
En esta receta usaremos pollo para el relleno y chile ancho para la salsa. Usted puede optar por otros chiles si desea preparar salsa verde, mole o cualquier otro tipo de salsa roja, en la que podría incluir chile guajillo, chipotle u otros.
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La enchilada es un plato muy nutritivo pues contiene no sólo los nutrientes del relleno —carne, vegetales o queso— sino también la tortilla y la salsa que la acompañan que aportarán a su nutrición. Las tortillas de hoy en día —bajas en grasa y sodio— son una buena fuente de calcio, potasio, fibra, hierro y vitaminas B.
Hay quienes prefieren freír ligeramente la tortilla de la enchilada. En nuestro caso, usaremos la tortilla al natural, más suave, y la colocaremos al horno. Si usted opta por freírla un poco, deberá estar pendiente al tiempo en que la mantiene friéndose, pues si la tortilla se endurece no la podrá enrollar.
En este plato son muy importantes la textura y el sabor de la salsa. Escoja qué tipo de relleno va mejor con cada tipo de salsa y de queso. Nuestra receta contiene un relleno de pollo, una carne de sabor simple que absorbe la intensidad de la salsa en toda su magnitud. Pero si usted opta por carnes —rojas, de cerdo o de pescado— la salsa deberá complementarse con estos tipos de carnes.
Un plato de enchiladas es como servir un centro de mesa comestible. Hay tantos colores, tantos aromas y sabores en él que despertarán hasta el apetito del más tímido de los comensales. Al servirlas, es recomendable acompañarlas con arroz amarillo y frijoles al estilo mexicano que se preparan más bien como acompañantes y, por tanto, no tienen la intensidad de sabor de unos frijoles al estilo caribeño.
En los Estados Unidos se sirven cientos de miles de enchiladas cada día. Al ser un plato fuerte, miles de personas lo devoran ya sea para mantenerse durante las horas de trabajo o como cena. En los restaurantes mexicanos, la enchilada es uno de los favoritos a la hora del “brunch” dominical.
Con nuestra receta encontrará la base para preparar cualquier tipo de enchilada, sólo que la salsa variará dependiendo de qué tipo de chiles use. Cuando lo sirva, piense en que ha llegado a su mesa uno de los grandes de la cocina mexicana, que ya trascendió fronteras y se ha incorporado también como favorito en el menú de los estadounidenses.