Los estados con las tasas más altas —y las más bajas— de impuestos sobre la venta

Maine

• Tiene un impuesto estatal sobre las ventas bajo del 5.5%.
• No aplica ningún impuesto sobre las ventas locales.
• La tasa impositiva para las personas físicas oscila entre el 5.8 y el 7.15% y para las corporaciones entre el 3.5 y el 8.93%.

Wisconsin

• Tiene un impuesto sobre las ventas estatal y local combinado del 5.7%.
• El impuesto sobre la renta individual oscila entre el 3.54% y el 7.65%, con una tasa fija del impuesto sobre la renta empresarial del 7.9%.

¿Qué estados tienen el impuesto sobre las ventas más alto?

En el otro extremo del espectro, estos estados se encuentran entre los que tienen la tasa de impuesto sobre las ventas más alta:

Louisiana

• Informa el impuesto sobre las ventas más alto con un impuesto sobre las ventas estatal y local combinado del 9.56%.
• Tiene un impuesto sobre la renta individual relativamente bajo que oscila entre el 1.85 y el 4.25%.
• Tiene un impuesto corporativo que oscila entre el 3.5 y el 7.5%.

Tenesí

• Tiene el segundo impuesto total sobre las ventas más alto con un 9.55%.
• No tiene impuesto a la renta individual.
• Tiene una tasa impositiva corporativa fija del 6.5% e impone un impuesto sobre los ingresos brutos, lo que significa que las empresas pagan impuestos sobre sus ingresos totales sin hacer ninguna deducción por gastos.

Después de Tennessee está Arkansas con el tercer impuesto sobre las ventas estatal y local combinado más alto (9.45%), Washington (9.38%) y Alabama (9.29%).

¿Qué tan altos son los impuestos sobre las ventas en tu estado?

En general, el impuesto sobre las ventas estatal y local combinado promedio es del 7.48%. Las tarifas de ciudad, condado y municipio varían. Estas tasas se ponderan por población para calcular una tasa impositiva local promedio. Los impuestos sobre las ventas en Hawái, Nuevo México y Dakota del Sur tienen bases amplias que incluyen muchos servicios de empresa a empresa.

Qué está sujeto a impuestos y qué no

Aunque pudiera parecerte que te cobran impuestos sobre todo lo que compras, en la mayoría de los estados algunas compras (como los alimentos) no están sujetas a impuestos. “Es una categoría muy importante, porque la mayoría de las personas gastan buena parte de sus ingresos en comestibles”, dice Janelle Fritts, analista de políticas de la Tax Foundation. 

Si bien cada estado tiene sus propias reglas sobre lo que se grava, generalmente los bienes tangibles sí pagan impuestos, mientras que los servicios no. Si una empresa vende algo que se supone debe estar sujeto a impuestos, ellos son los que normalmente recaudan los impuestos de sus clientes y luego los envían al gobierno.

Aun en ese caso, las reglas pueden variar bastante. Algunos estados que eximen a la comida del impuesto sobre las ventas lo imponen sobre las gaseosas y los dulces. Luisiana impone impuestos sobre el agua embotellada pero no sobre las gaseosas ni los dulces. Los comestibles que se compran a través del Programa Suplementario de Asistencia Nutricional (SNAP), generalmente llamado cupones de alimentos, no están sujetos a impuestos estatales sobre las ventas. Todos los estados menos Illinois eximen a los medicamentos recetados de los impuestos sobre las ventas, e Illinois solo les impone un impuesto del 1%, comparado con el 6.25% de su impuesto estatal general sobre las ventas. Varios estados —Connecticut, Florida, Maryland, Minnesota, Nueva Jersey, Nueva York, Pensilvania, Texas, Vermont y Virginia— y el Distrito de Columbia no cobran impuestos sobre las ventas en los medicamentos de venta libre.

Si una empresa vende productos fuera del estado, solo tiene que preocuparse por recaudar el impuesto sobre las ventas si vende por encima de un cierto umbral, generalmente alrededor de $100,000 en ventas o una cierta cantidad de transacciones.

¿Cómo se determina el impuesto sobre las ventas al comprar en línea?

Cuando compras un producto en línea, se supone que debes pagar un impuesto sobre las ventas, al igual que cuando compras cosas en una tienda, dice Jared Walczak, vicepresidente de proyectos estatales de la Tax Foundation. En el pasado, muchos vendedores en línea no tenían que cobrar ese impuesto. En cambio, se suponía que los consumidores debían pagarlo, pero casi nadie lo hizo.

Tras la decisión de la Corte Suprema de Dakota del Sur contra Wayfair en 2018, las empresas que venden una cierta cantidad de productos dentro de un estado, incluso si no tienen presencia física, debían recaudar y enviar el impuesto por esas ventas. No importa si la empresa está en un estado que no requiere un impuesto sobre las ventas; todavía tienen que manejarlo para otros estados donde encuentran un “nexo” suficiente de ventas.

Los consumidores que viven en un estado sin impuesto sobre las ventas normalmente no tendrán que pagar impuestos sobre las ventas sobre la mayoría de las cosas que compran, ya sea en una tienda o en línea.