Vida Sana
A nadie le agrada hablar de la muerte, ni de funerales. Pero en algún momento debemos enfrentar la realidad; y por tanto, se necesitará pensar en los arreglos funerarios. Puedes facilitar el proceso para tu familia y lograr que te despidan como deseas si planeas tu entierro.
Para algunas personas, estos preparativos pueden parecer desconcertantes y hacerlos sentir como si estuvieran obsesionados con la muerte. Es probable que esta sea la razón por la que solo el 36% de los adultos mayores ha hablado con un ser querido de sus planes de entierro, según una encuesta del 2021 de National Funeral Directors Association (NFDA en inglés).
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1. ¿Cuáles son los componentes de un funeral?
Para planear un funeral, debes saber lo que sucede en uno. En general, los funerales tienen tres componentes: la preparación del cadáver, la ceremonia y el entierro. Hay varias opciones para cada uno de ellos. ¿Embalsamar o cremar? ¿Un servicio completo en una funeraria, un servicio junto a la tumba o una ceremonia no convencional? ¿Quién asistirá? ¿Ataúd cerrado o abierto? ¿Entierro en la tierra o una tumba, o el esparcimiento de las cenizas en un lugar significativo? Puedes encontrar listas de control para la planificación de funerales en internet que te ayuden a saber qué decisiones tendrás que tomar.
2. Planifica con antelación, pero no pagues por anticipado
Las funerarias venden planes que prometen mejores precios si compras un paquete ahora, años antes de fallecer. No lo hagas, dice Joshua Slocum, director ejecutivo de la Funeral Consumers Alliance (FCA en inglés), un grupo de protección al consumidor en la industria de los servicios relacionados con la muerte.
"Puedes planear un funeral con anticipación sin pagar por adelantado", dice él. "Planear no es lo mismo que prepagar".
La desventaja al prepagar, según Slocum, es que tu situación puede cambiar entre el momento en que pagas y el de tu muerte. Las funerarias pueden quebrar y dejarte sin nadie a quién reclamar el servicio que prepagaste. O puede que mueras en una ciudad lejana a la funeraria y al cementerio que pagaste. "Comparar precios en el momento del fallecimiento es una estrategia mucho mejor para ahorrar dinero", dice Slocum.
La única excepción es si esperas un desembolso de Medicaid. En ese caso, un funeral prepagado puede ser una sabia decisión.
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