Vida Sana
“Por favor no me conviertas en un hazmerreír”, le suplicó Marilyn Monroe a un periodista poco antes de morir. Todo lo que ansiaba era el respeto y el amor del público. El nuevo filme Blonde (en inglés) la reduce a un retrato sórdido y sin gracia. La película crea situaciones ficticias extremas para degradarla y humillarla. Para ser justos, tanto el director Andrew Dominik como Joyce Carol Oates, autora de la novela que él adaptó, han sido francos en afirmar que Blonde es un relato totalmente ficticio. Los lugares, la vestimenta y los peinados se ven auténticos. Con habilidad, el cinematógrafo Chayse Irvin recrea visualmente los momentos icónicos de su vida. Pero no hay ni una línea dicha por Marilyn en el filme que sea verdad.
¡ÚLTIMA OPORTUNIDAD! - Únete a AARP a precios del 2024; las tarifas aumentan en el 2025.
Obtén acceso inmediato a productos exclusivos para socios y cientos de descuentos, una segunda membresía gratis y una suscripción a AARP The Magazine.
Únete a AARP
La película te podría hacer creer que Marilyn era una mujer tonta y desorientada, demasiado estúpida para rebelarse contra las viles violaciones de las que era presa; tan solo una pieza de ajedrez que movían hombres abominables, violentos, pervertidos y libidinosos. Sin duda la acechaban enormes problemas y fue una figura trágica. Se crio en un sistema abusivo de cuidado temporal y sufría de depresión crónica e insomnio. Pero tenía una pasión indomable por mejorar su vida, superar sus demonios y por atreverse a trepar más alto y ser famosa. Blonde la despoja de su conocido ingenio, encanto e inteligencia. Amaba a los niños y fue una de las primeras celebridades en hablar públicamente sobre el abuso infantil. Con una astucia política innata, desafió al Comité de Actividades Antiestadounidenses del Congreso y tuvo las agallas para exigir mejores guiones y la autoridad para aprobar a los directores de sus películas. La película omite que fue una de las primeras mujeres en resistirse al sistema de los estudios cinematográficos y en formar su propia empresa de producción.
Era sensible y vulnerable, pero podía ser decidida y tenaz. La usaron, pero también sabía usar expertamente a otros, y se ocupaba de averiguar quién podía ayudarla. Desde un principio, fotógrafos, periodistas y profesores de actuación percibieron su cualidad especial e hicieron todo lo posible por promoverla. En Blonde, se retrata a Marilyn únicamente como una mujer obsesionada por el sexo, degradada por cada hombre que conoce, jamás digna de la más mínima apreciación o admiración.
Analicemos algunas de las escenas para separar la verdad de la ficción, calificándolas con una escala del 0 al 10.
Gladys, la madre de Marilyn, intenta ahogarla en la bañera
Lo que ocurre en la película: Gladys mantiene sumergida en la bañera a su hija de 8 años mientras le grita que su padre se marchó sin casarse con ella por culpa de Marilyn.
Lo que ocurrió en la vida real: la abuela materna, Della Monroe, irrumpió en la casa e intentó sofocar con una almohada a Marilyn cuando era bebé mientras desvariaba sobre el pecado de haber nacido fuera del matrimonio. Más tarde, Gladys —con un cuchillo en la mano— enloqueció frente a la niña. Posteriormente pasó la mayor parte de su vida en un hospital psiquiátrico, pero no hubo ninguna escena en la bañera y Gladys no culpó a Marilyn por el abandono de su padre.
Puntaje de veracidad: 5 de 10
Marilyn tiene un ménage à trois
Lo que ocurre en la película: durante la filmación de Gentlemen Prefer Blondes en 1952, Marilyn queda embarazada después de participar en un trío sexual con un asqueroso, siniestro, pretencioso y necio Charles Chaplin Jr. y con Edward G. Robinson Jr. Ella desea desesperadamente quedarse con el bebé, pero hace lo que le dicen y aborta.
También te puede interesar