Canosas y ¡más bellas!

Durante Fashion Week en Nueva York, conversando con una amiga muy chic sobre las tendencias de belleza, me dijo: “Me estoy dejando las canas, porque el cabello blanco-plateado está tan de moda, que es tan sexy como si lo llevara rubio”. Agregando, “Silver is the new blonde”. Y mientas me hablaba me fijé que mi amiga también lucía diferente porque ¡llevaba un maquillaje diferente!

Dejarse crecer las canas, o teñirse el pelo en tonos blancos o plateados, como muchas famosas —Lady Gaga entre ellas—, es algo nuevo y provocativo y una tendencia que a algunas mujeres hace lucir regias. Pero —¡y esto a veces se olvida!— un maquillaje nuevo que realce ese cambio es vital. Aquí algunos consejos indispensables.

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1) ¿Cómo te gusta lucir? ¿Qué imagen prefieres proyectar?

¿Prefieres una nueva imagen más sutil, que no se note mucho, pero que realce tu rostro? ¿O quieres transformarte más y lucir sensacional con un cambio de maquillaje y colorido de 180 grados?  Según la genial Bobbi Brown, cuando cambiamos el color del pelo el mejor consejo es quitarnos todo nuestro maquillaje y buscar ayuda experta al menos una primera vez. Aprovecha el servicio de cortesía de consejeras de belleza en las tiendas —o compañías que te atienden personalmente, al estilo de Avon, Mary Kay o Arbonne— y escoge el maquillaje adecuado para tu nuevo color de pelo. Esas consejeras pueden ser tu mejor guía para un nuevo maquillaje y no te cuesta nada.

2) Una nueva base y la importancia del colorete

De acuerdo con maquilladores y estilistas, es importante usar un maquillaje que aporte brillantez al rostro, evitando parecer pálidas o deslucidas. Y la base o foundation es vital para acentuar ese cambio. Una base con un color más cálido, en tonos más intensos, es la ideal. Aléjate de las bases mate, o las demasiado pálidas, azulosas y frías. Si tienes una tez amarillenta, las bases color melocotón o bronceadas serán para ti. Si eres de tez rosada y pálida, busca bases que acentúen ese fondo de piel, pero en tonos rosa más intensos. La idea es llevar una base que “levante” tu look, incluyendo aquellas que imitan un toque de sol, como si hubieras ido a la playa. 

El colorete o blush, es vital para realzar tu rostro con tu nuevo color de pelo. El consejo es usar un par de tonos más intensos que el que has usado hasta ahora. Y al final dispensa por toda la cara, un alegre highlight —o reflejo luminoso de color— usando una brocha ancha, con polvos bronceadores o bronzer que ¡darán vida y una imagen saludable a tu rostro!