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9 consejos de etiqueta para salir a comer con tu perro

Una guía para que sean bienvenidos en los restaurantes.


spinner image Mujer sentada en un restaurante junto a su perro
Getty Images

Con la llegada del buen tiempo, es posible que te apetezca comer al aire libre en tu restaurante favorito, acompañado de tu amigo de cuatro patas.

Cada vez es más común que las personas lleven a sus perros a todas partes, incluidos los restaurantes, las cafeterías y otros establecimientos que sirven comida. Por suerte, la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. actualizó recientemente su código alimentario e indicó que los clientes pueden llevar a sus perros a las zonas al aire libre de los restaurantes "cuando lo permitan" las políticas estatales, locales y de los restaurantes.

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Eso es muy conveniente, ya que en el país hay más personas con perros que con cualquier otro tipo de mascota. La adquisición y adopción de perros se disparó durante la pandemia de COVID-19, de modo que ahora hay acompañantes caninos en más de 65 millones de hogares en el país, según la American Pet Products Association.

"El vínculo humano-canino es único", afirma Brandi Munden, vicepresidenta del American Kennel Club (AKC). "Un perro se convierte en parte de la familia", incluso para las salidas familiares, añade.

Los códigos de salud impiden que la mayoría de los restaurantes dejen entrar a los perros, pero muchos los admiten en las zonas al aire libre.

En total, 20 estados tienen normas o leyes que permiten a los clientes de los restaurantes llevar acompañantes caninos a los patios, pero las políticas varían mucho según la localidad. La excepción son los perros de servicio (pero no los de apoyo emocional), que pueden entrar en cualquier restaurante o patio si acompañan a personas con discapacidades. Los propietarios de perros de servicio deben cumplir los requisitos locales de licencia y registro, pero no necesitan mostrar documentación ni certificados. Como siempre, asegúrate de que tu perro esté al día con las vacunas.

Cuando salgas con tu perro, prepárate de modo que puedas divertirte, que tu mascota esté cómoda y que tu juguetón can no moleste a los demás clientes.

spinner image Tres perros acostados en el suelo de un restaurante
A Sheryl Gadol le gusta llevar a comer a sus tres perros.
Cortesía de Sheryl Gadol

Sheryl Gadol viaja a menudo con sus tres cocker spaniels americanos —Elvis, Larry y Ladybug— y no lo piensa dos veces a la hora de llevarlos a los patios de los restaurantes. Pero también es consciente del pacto social implícito cuando lo hace.

"Es maravilloso llevar a tu perro contigo, pero deben ser capaces de permanecer callados y tranquilos", dice la residente de 58 años de North Smithfield, Rhode Island. "No pueden estar saltando e intentando comerse tu comida o la de los demás clientes".

Sigue estos nueve consejos para asegurarte de que tú y tu amigo peludo estén preparados para cualquier situación.

1. Asegúrate de que tu perro se comporte bien

Según los expertos, la prioridad número uno es asegurarte de que tu perro esté bien entrenado y se comporte bien. Eso significa no ladrar, gruñir ni saltar sobre los clientes que lo rodean. Gadol siguió el programa Canine Good Citizen del AKC para adiestrar a sus perros, en el que los canes tienen que pasar una prueba de 10 habilidades de cortesía en público.

Puedes entrenar a tu perro tú mismo, pero Tiffany Tupler, veterinaria del sitio web de mascotas Chewy, recomienda entrenadores de perros certificados por el Certification Council for Professional Dog Trainers y la International Association of Animal Behavior Consultants. En el caso de los adultos mayores, tal vez sería buena idea el entrenamiento con un clicker, una técnica de adiestramiento con refuerzo positivo, porque ayuda a los dueños a controlar a los perros sin mucho esfuerzo físico y es fácil de usar.

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"Aprende a conectarte con tu perro cuando salgas", señala Tupler, que tiene tres perros en casa. "Practica, practica, practica. Añade poco a poco otros distractores y sigue entrenando cuando tu perro esté en casa. Ve a sentarte al patio de un restaurante un martes, que es un día en que no hay mucha gente".

2. Conoce a tu perro

Según los expertos, es importante entender el lenguaje corporal del perro y conocer los factores que lo hacen ponerse nervioso o ansioso y que lo hacen ladrar, correr o incluso morder.

Muchos perros tienen fobias al ruido que se desencadenan cuando hay ovaciones o pasan camiones grandes, o les temen a los objetos desconocidos, como una bicicleta o un cochecito de bebé, explica Tupler. Asegúrate de saber reconocer cuándo se siente incómodo tu perro.

Vigila a tu perro cuando salgan para detectar señales de miedo o ansiedad. Si se encoge, dobla las orejas hacia atrás, tiene la cabeza gacha, baja la cola y la mete entre las patas, o tiembla o mantiene la postura rígida, esto indica que es hora de regresar a casa. "¿Cómo se ve un perro cuando está asustado?", pregunta Tupler. "¿Cómo se ve un perro cuando está feliz?".

Maureen Bovie, de 71 años, de Petaluma, California, no lleva a su perra, Curly Sue, a restaurantes.

"Es tan grande que no me parece que lo disfrutaría", dice Bovie de su perra, una mezcla de pastor alemán y malinois belga, de 94 libras y pelo largo. Y "no quiero interrumpir la experiencia de nadie más".

3. Usa la correa

Ponle la correa a tu can cuando salgas a comer, aconseja Munden, que tiene tres perros. La correa debe medir seis pies o menos, ya que una correa más corta permite controlar mejor al perro, añade. No utilices una correa retráctil porque presenta peligro de tropiezos para ti y para otras personas.

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4. Prueba un portador de mascotas

Si tienes un perro pequeño, considera ponerlo en un portador de mascotas mientras están en el restaurante. El portador no solo contendrá al perro, sino que hará que tu amigo peludo se sienta más cómodo en un entorno desconocido.

Gadol usa el portador con su perro, Elvis, en los restaurantes. "Para mí, representa seguridad", dice. "Es limpio y seguro".

5. Elige con cuidado dónde sentarte

Ten en cuenta la comodidad de tu perro, del personal y de los demás clientes al elegir tu asiento en un restaurante, una cafetería o un bar.

Elige un lugar poco transitado y alejado de las multitudes y las zonas de paso donde tu perro pudiera reaccionar ante otros canes, transeúntes o vehículos, sugiere Tupler. Colocar al perro del lado interior en los patios y las zonas de paso también lo protege de que alguien le pise una pata o la cola o de otros accidentes.

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Algunos restaurantes permiten que los perros se suban a los asientos, pero no los dejan subir a la mesa ni comer de tu plato. Asegúrate de que tu perro no bloquee las zonas de paso para que otros clientes puedan pasar y el personal pueda hacer su trabajo.

"Lo deseable es que tu perro esté tranquilo en una variedad de situaciones", indica Munden. "Es tu responsabilidad asegurarte de que tu perro se comporte bien".

6. Ocúpate de que el perro haga sus necesidades de antemano

Antes de ir a un restaurante, asegúrate de que tu perro haya orinado y defecado para evitar accidentes. No utilices las instalaciones del restaurante para este fin, advierte Munden, ya que, si lo haces, "es posible que no los hagan sentir muy bienvenidos" ni a ti ni a tu amigo de cuatro patas. Lleva bolsas para recoger el excremento y toallitas húmedas adicionales por si acaso.

7. Lleva agua para tu perro

Algunos restaurantes proporcionan agua o un tazón para perros si los pides, pero lleva tu propio tazón plegable y agua por si acaso. Esto es de especial importancia en un día caluroso o húmedo para que tu perro no se sobrecaliente.

8. Lleva golosinas y más

Está bien llevar golosinas a un restaurante para mantener ocupado al perro y evitar que babee al oler la comida humana. Quizás sea buena idea llevar una toalla o una manta para que tu perro se siente o se acueste, sobre todo si el suelo está caliente.

Algunos establecimientos que admiten perros, como Dairy Queen, Shake Shack y Starbucks, ofrecen golosinas e incluso menús especiales para los clientes caninos en el patio, pero llama de antemano para asegurarte de que así sea. BringFido (en inglés) y otros sitios web ofrecen una lista de restaurantes y otros comercios que admiten perros.

9. Limpia todo lo que ensucie tu mascota

Las toallitas húmedas te serán útiles si tu perro babea o deja restos de comida en el suelo. El objetivo es hacer que la experiencia culinaria sea positiva no solo para ti y para tu perro, sino también para los clientes y el personal, dice Tupler: "No crees inconvenientes para" el personal del restaurante.

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