Vida Sana
Dos, tres, cuatro tazas…
Se considera que tomar tres a cuatro tazas de café (cada taza de 8 onzas) al día es una cantidad razonable. Es importante recordar que la preparación del café sí importa. Los cafés no filtrados (francés o turco) retienen sustancias como el cafestol y el kahweol, que pueden elevar el colesterol malo. Es importante entender que cuanto más “extras” le agregamos —crema, azúcar, chocolate, etc.— mayor será el número de calorías de la bebida.
Efecto positivo sobre las funciones cerebrales
Varios estudios han revelado que la cafeína es un estimulante que además de propiciar la sociabilidad de la persona — es decir, la hace más receptiva al diálogo— tiene efectos positivos sobre la salud cerebral. Podría mejorar las funciones cognitivas o intelectuales y disminuir el riesgo de padecer las enfermedades de Alzheimer y Parkinson. Tomar una o dos tazas grandes tendría el mismo efecto que tomar varias cantidades más pequeñas.
Puede proteger contra ciertos tipos de cáncer
Estudios han encontrado que el café puede proteger contra el cáncer del hígado, del colon y del recto, asimismo contra el cáncer de la piel de tipo melanoma. Los estudios sobre cáncer del hígado se han hecho en Europa y Japón y se piensa que el efecto protector es responsabilidad del ácido clorogénico, sustancia que también es beneficiosa para la salud del corazón.
Puede aumentar la presión arterial
Este es uno de los efectos más preocupantes del consumo de café. En un estudio norteamericano y otro europeo se encontró, por ejemplo, que el consumo moderado de la bebida podía aumentar persistentemente la presión arterial. Se piensa que el misterio de por qué ese efecto se presentaba en algunas personas, y en otras no, se descubrió cuando se vio que probablemente está genéticamente determinado. Solo las personas que acarrean una mutación genética que les impide destruir la cafeína son afectadas.
Puede intervenir con un sueño reparador
Este es el problema entre el café y yo. No puedo tomar café después de las 5:00 p.m. ; si lo hago no puedo dormir bien. Al respecto fue interesante encontrar un estudio que descubrió que el efecto negativo que tiene el café sobre el sueño dura hasta seis horas después de consumirlo. Al igual que con la presión arterial es probable que el efecto sobre el sueño sea también genético; muchas personas toman un café antes de dormir.
Puede producir ansiedad y ataques de pánico
Nunca olvidaré la llamada de un buen amigo, ni su voz en el teléfono, cuando me decía que se estaba muriendo con un ataque al corazón. Después de un breve interrogatorio descubrí que había tomado un doble café expreso y los síntomas del ataque de pánico habían empezado poco después. Las personas que sufren de ansiedad crónica deben tomar café con mucho cuidado. La intoxicación por café y las crisis de ansiedad por café son diagnósticos reconocidos por la American Psychiatric Association.