Elizabeth Shaughnessy

El ajedrez puede ser una parte fundamental del desarrollo de un niño. La mente humana necesita la profundidad de pensamiento que requiere el juego. Las personas también suponen que un niño que tiene dificultades en el salón de clases tendrá dificultad con el ajedrez. Pero a muchos niños a quienes les cuesta aprender les encanta el ajedrez. Lo aguardan con entusiasmo. Recuerdo muy bien a un par de hermanos que eran muy inteligentes, pero eran eternos alborotadores. Siempre causaban problemas en clase y estaban constantemente en la oficina del director. Ninguno de los maestros en esa escuela creyó que les iría bien en mi clase de ajedrez. Sí, al principio se sentaban al fondo del salón y se comportaban mal, pero eso terminó una vez que se interesaron en el juego. Pronto se convirtieron en dos de mis mejores jugadores de ajedrez, y su comportamiento en la escuela también mejoró en forma notable. Finalmente, aprendieron a sentarse quietos, escuchar y aprender.

​​Los beneficios del ajedrez también van más allá del aspecto académico. Recuerdo a un estudiante de 5.^o grado, Mateo, un niño con síndrome de Asperger, que tenía problemas con las habilidades sociales. Con el ajedrez, Mateo encontró su pasión y una actividad en la que podía destacarse. El ajedrez les brinda estructura y confianza a los niños que tratan de navegar un mundo emocionalmente caótico. Hoy en día, Mateo es un profesional sumamente exitoso.

Consejos para quienes desean marcar la diferencia

Presten atención a los niños. Escúchenlos, denles un nuevo desafío y observen las cosas que ocurren. Aprender no es solo llenar la mente de datos, también es estimular. Cuando la mente comienza a cuestionar esos datos, eso es aprendizaje. Es como leer literatura: se puede hojear un libro, pero quienes leen en profundidad y hacen preguntas descubren muchísimo más que quienes no lo hacen.

Por qué mi estrategia es única

Hay muchos programas de ajedrez excelentes en el área de la Bahía, pero nuestro programa es el único que dedica una cantidad importante de recursos a dar clases de ajedrez gratuitas o con cargos reducidos en las escuelas del Título 1.  La mayoría de los niños que asisten a estas escuelas subfinanciadas están en desventaja económica y sus familias no tienen ingresos suficientes para satisfacer las necesidades básicas. Casi ninguno conoce el ajedrez. Nosotros despertamos y fomentamos su intelecto porque no les enseñamos qué es lo que deben aprender, sino cómo hacerlo. Un simple juego de ajedrez de $10 abre un mundo totalmente nuevo ante sus ojos.​

A lo largo de los años, nuestros programas han producido un campeón mundial juvenil, cuatro grandes maestros, maestros internacionales y muchos campeones nacionales y estatales. Pero la visión de Berkeley Chess School nunca ha sido producir maestros, si bien eso ocurre con frecuencia. La misión es ayudar a todos los niños, especialmente a aquellos que luchan con las desigualdades del aprendizaje, a alcanzar su máximo potencial académico, prosperar como buenos ciudadanos y seres humanos, y convertirse en campeones de sus propias vidas.