Estados con menor presión fiscal

Los impuestos pueden ser una enorme carga para un jubilado que tiene ingresos fijos. Pero no deberían serlo: la mayoría de los estados ofrecen algún tipo de reducción fiscal.

• El trío impositivo: Alaska y Nuevo Hampshire no cobran impuestos sobre las ventas, los ingresos ni el Seguro Social. Alaska ofrece otra ventaja a sus residentes: un pago anual en efectivo de las regalías correspondientes a los vastos depósitos de petróleo del estado. En el 2013, el Alaska Permanent Fund Dividend (dividendo del Fondo Permanente de Alaska) fue de $900.

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• Siete santuarios aceptables: Florida, Nevada, Dakota del Sur, Tennessee, Texas, Washington y Wyoming tienen impuestos sobre las ventas, pero no exigen el pago de impuestos estatales sobre los ingresos, ni gravan aquellos ingresos provenientes del Seguro Social y pensiones.

• Tres lugares donde comprar: Delaware, Montana y Oregón no tienen impuestos sobre las ventas.

• Amigos de los jubilados: los ingresos provenientes del Seguro Social pasan sin tributar en 36 estados y Washington D.C.; Iowa se unirá al grupo este año.

• Cuidado con la letra pequeña: una cantidad de estados tienen otras cargas fiscales, tales como impuestos sobre los intereses y dividendos (Nuevo Hampshire y Tennessee), altos impuestos sobre las ventas (Nueva York y Arizona) o altos impuestos sobre las propiedades (Nueva Jersey y Connecticut). Por lo tanto, consulta a un asesor financiero antes de mudarte al paraíso de tus sueños.