Cómo la igualación de precios puede ayudarte a ahorrar mucho dinero

Cómo utilizar la igualación de precios para ahorrar dinero

1. Busca las políticas de la tienda

Consulta las secciones de políticas o atención al cliente del sitio web de un minorista, o busca en internet el nombre de la tienda más las palabras “price match” (igualación de precios). Si la tienda tiene una política de igualación de precios, averigua qué precios de la competencia igualará y lee la letra pequeña. Por lo general, el artículo debe estar en stock y tener el mismo número de modelo; también es posible que deba ser del mismo tamaño y color.

2. Encuentra otros precios

Antes de llegar a la caja, ya sea en línea o en una tienda, usa un motor de búsqueda de comparación de precios como Google Shopping, ShopSavvy o Price.com (enlaces en inglés). También puedes configurar alertas por correo electrónico y mensajes de texto para saber si el precio cambia o cuándo. Otra opción es ir directamente a los sitios de competidores minoristas calificados o buscar su último folleto publicitario.

3. Obtén pruebas 

Si encuentras un precio más bajo, imprime la oferta, haz una captura de pantalla o lleva contigo a la tienda el anuncio impreso que describe el precio que deseas igualar. No fotocopies el anuncio; algunos minoristas solo aceptan el original. Si estás en una tienda, muéstrale la oferta al cajero. Si estás en el sitio web de la tienda, llama al servicio al cliente o inicia una conversación en línea. Dile al representante que has encontrado un mejor precio en otra tienda y que te gustaría solicitar un ajuste de precio. Siempre y cuando tengas pruebas y la oferta cumpla con la política de la compañía, deberías obtener el mejor precio.

La prueba de igualación de precios de Consumers’ Checkbook arrojó resultados impresionantes. Brasler dijo que la organización sin fines de lucro encontró un par de zapatillas Fulton para hombres de Vince por $225 en Nordstrom, pero las igualó al precio más bajo de Bloomingdale’s de $168.75. Home Depot redujo su precio de un refrigerador Frigidaire de $728 a $639 después de que los investigadores le pidieran que igualara el precio en Lowe’s.

Brasler dice que los compradores del grupo generalmente recibían precios más bajos simplemente buscando ofertas de la competencia en sus teléfonos, mostrándoselas al personal de la tienda y pidiendo que igualaran el precio. A veces, los compradores eran dirigidos a los mostradores de servicio al cliente para completar la transacción, pero a menudo el precio más bajo se proporcionaba directamente en la caja registradora. La lección clave para los compradores: no tengan miedo de hablar. “No creo que deban sentirse mal por ahorrar dinero”, dice Brasler. “Es importante asegurarse de que no les estén cobrando de más”.