Los generadores eléctricos pueden aportar energía a tu hogar

Dónde colocarlos

Los generadores domésticos son parecidos a una gran nevera. Normalmente, se atornillan a una plataforma de cemento, dice Rizzo. Si están cerca de las líneas de suministro eléctrico y de gas, la instalación es más económica. Los generadores son básicamente pequeños motores, lo que significa que hacen ruido. "No son demasiado ruidosos, pero tal vez no deberías poner uno al lado de la ventana de tu dormitorio", dice.

Costo y tamaño 

El costo de los generadores de reserva varía en función al tamaño de la casa y lo que necesite en términos de electricidad, explica Rizzo. Puede costar entre $10,000 y $13,000 (con más la instalación) para una casa de unos 3,000 pies cuadrados. Puede que los propietarios se vean tentados a disminuir sus gastos con un generador portátil que funciona a gasolina o diésel; estos se venden en tiendas para el hogar por menos de $1,000 y no hace falta la instalación de un profesional. Sin embargo, no son tan fiables. Si bien los generadores portátiles no están pensados para que se guarden en el exterior, deben usarse en el exterior. “Así que tendrás que llevarlo a un lugar resguardado de la lluvia cada vez que necesites usarlo”, dice Rizzo, y añade que, a menudo, las personas se sienten tentadas de encenderlos en el garaje, lo cual es peligroso por el monóxido de carbono. “Son un peligro”, afirma. Además, no abastecerán de electricidad a todo tu hogar; solo a los aparatos que puedan enchufarse a un cable de extensión (lámparas, computadoras, estufas, un solo refrigerador).

¿Merece la pena el gasto?

Si crees que vas a recuperar la inversión del generador de emergencia cuando vendas la casa, no cuentes con ello. En promedio, el equipo aumentará el valor de tu casa solo un poco más del 50% del costo del generador, según un estudio del 2017 publicado por la revista especializada Remodeling.

Pero hay otros aspectos que se tiene que tomar en cuenta además del rendimiento de la inversión. El Departamento de Energía no lleva un registro de todos los apagones que suceden en Estados Unidos; solo hace un seguimiento de los que consideran "eventos de perturbación eléctrica". El criterio varía en función de la causa; digamos que se trata de un desastre natural, un ciberataque o una falta de suministro para abastecer la demanda. Desde principios de la década del 2000 hasta el 2020, la cantidad de este tipo de eventos se ha multiplicado por 12. Se trata de algo que va más allá de un inconveniente. En Texas, se atribuye al corte de electricidad las centenas de muertes ocurridas en invierno. Marshall afirma que entre sus principales clientes se encuentran los centros con asistencia para adultos mayores y los propietarios que envejecen en sus propios hogares. Máquinas de presión positiva en las vías respiratorias (CPAP), camas eléctricas ajustables y medicamentos que necesitan estar refrigerados —hay una larga lista de motivos por los que los generadores de reserva no son solo un lujo, sino algo primordial. "Mis clientes no pueden permitirse un corte de luz", dice.

Planifica con anticipación

Rizzo dice que el 80% de sus clientes tienen más de 50 años; no se trata únicamente de algo imprescindible para la salud. En el caso de algunas personas, hay que tener en cuenta también el factor familiar: “quieren ser el centro de reunión de los hijos y nietos cuando falte la electricidad”. Para reducir costos, dice que algunos clientes juntan sus recursos para comprar un generador para una casa que sirva de refugio para varios amigos o familiares. ¿Cuándo comprar? Es como plantar un árbol, el mejor momento fue ayer. Hay una alta demanda de generadores, así que no es raro que haya que esperar hasta cinco meses para la instalación. "Hago 10 instalaciones a la semana", dice Marshall. "El mercado está en auge".