Los adultos mayores impulsan las comunidades en Minneapolis

Beeth afirma que su propio equipo, de 75 empleados, es uno de los más diversos, incluidos los trabajadores mayores. "Eso es intencional. Las personas aquí saben cómo las recibimos y les enseñamos". Un miembro del equipo siguió recibiendo beneficios aun después de reducir sus horas de trabajo para cuidar a sus nietos y a sus padres enfermos. “No queremos que tenga que elegir entre la familia y el trabajo”, dice Beeth.

“Años atrás, no había muchas organizaciones locales que se enfocaran en el envejecimiento. Parece que ahora eso es mucho más apremiante”, dice Philomena Satre, directora de diversidad e inclusión y alianzas estratégicas externas en Land O’Lakes. “He descubierto que el área de Minneapolis–Saint Paul es sumamente colaboradora, y las cosas que estamos haciendo y las coaliciones que existen, y la gente que trabaja en distintas iniciativas han marcado realmente una diferencia”.

Satre comenzó un grupo de empleados llamado Aging Successfully que se reúne para hablar sobre temas que afectan a los trabajadores mayores, como por ejemplo el cuidado de sus propios padres en su vejez. 

Galbraith alquila un condominio en el bullicioso distrito central del North Loop, a 15 minutos a pie de su trabajo, y hace esta caminata todo el año gracias a que tiene “buena vestimenta de invierno”. También acostumbra a caminar a lo largo del Río Mississippi y está junto a unos pasos de la parada del tranvía. 

En su trabajo en Metro Transit se dedica a seleccionar propiedades de Metro Transit que puedan convertirse en urbanizaciones con corredores transitables y colabora con planificadores urbanos y constructores que promuevan vecindarios aptos para transitar y caminar. Galbraith indica que las construcciones que sirven a residentes mayores se adecuan naturalmente a la ciudad. “Es una demanda del mercado”, dice.

Uno de estos complejos es The Pillars, un centro de vivienda para personas mayores que tiene un valor de $85 millones, a dos cuadras de la parada del tren ligero en Prospect Park y cerca de University of Minnesota. El centro tiene 283 unidades y se espera que se inaugure en la primavera del 2020. Contará con comercios minoristas en la planta baja, una sala de teatro y actividades comunitarias con una terraza contigua y un centro de ejercicio físico, servicio de autobús y un centro de cuidado diurno donde las personas mayores podrán interactuar con los niños. 

Otro atractivo para los residentes: la membresía en la asociación de exalumnos de la universidad, que ofrece descuentos para eventos universitarios y deportivos. Los residentes mayores también encuentran un entorno comunitario en otras partes de la ciudad.

“Aquí hay oportunidades sorprendentes para participar en excelentes actividades”, dice Charlie Lakin, de 73 años, quien es parte de la Advisory Commission on Aging de la ciudad. Pasa varias horas al mes transportando a los vecinos y haciendo trabajos esporádicos para ellos por medio de Southeast Seniors, una organización sin fines de lucro que ayuda a los residentes mayores a permanecer en su hogar. 

Al otro lado de la ciudad, Nokomis Healthy Seniors cumple una misión similar, donde presta servicios a alrededor de 500 residentes mayores cada año. Con el respaldo de subsidios municipales, la organización tiene voluntarios que ofrecen programas como educación de la salud, transporte, ejercicio y entretenimiento, indica Megan Elliasen, directora ejecutiva. 

También se están transformando los vecindarios. Un plan muy discutido que se aprobó este año elimina la zonificación unifamiliar para crear más densidad. El plan —probablemente el primero de este tipo en el país— permite estructuras residenciales de hasta tres unidades de vivienda en cada vecindario de la ciudad. 

"Las personas mayores me han dicho que necesitan más opciones en el mercado de la vivienda” para quedarse en sus hogares y vecindarios, dice Lisa Bender, presidenta del Concejo Municipal y defensora del plan. “Una mayor flexibilidad facilitará el logro de ese objetivo".

El cambio crea oportunidades de “comunidades intencionales” en las que los adultos mayores pueden compartir los recursos para recibir pedidos a domicilio, transporte y cuidados, indica Christina Kendrick, especialista en comunidades de adultos mayores de Minneapolis. “Cuantas más opciones de vivienda tengamos, más personas se beneficiarán”.

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