Vida Sana
Por mucho que ella amaba a su padre de 83 años, a Ginny, de 57 años, no le gustaba ser su cuidadora principal durante su lento declive a causa de la enfermedad de Parkinson. Encontraba emocionalmente agotador tratar de calmar su frustración cuando él no podía controlar sus movimientos. Cepillar sus dientes, cortarle la carne y mantenerlo firme cuando caminaba suponían una carga física para ella.
Sin embargo, lo que Ginny encontró más difícil durante esos años como cuidadora fue la profunda decepción que sintió. Las personas con las que había contado para acompañarla y apoyarla se distanciaron de ella. Incluso su padre, quien ella sabía que la quería, no siempre la trataba bien.
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Ginny esperaba que apreciara todo lo que estaba haciendo por él, pero a menudo era brusco y a veces la hablaba en un tono desagradable. Ella había confiado en que sus hermanas más jóvenes compartieran la responsabilidad del cuidado, pero continuaron dando excusas poco convincentes. También había esperado que los médicos de su padre le dieran más orientación, especialmente a medida que se triplicó su número de medicamentos, pero tardaban días en responder a sus preguntas. Incluso su esposo la decepcionó. Si bien la ayudaba con tareas específicas si se lo pedía, Ginny creía que un cónyuge realmente dedicado debería ofrecer ayuda sin tener que pedírsela.
Al igual que Ginny, la mayoría de los cuidadores familiares tienen al menos algunas expectativas insatisfechas. Se irritan cada vez que otros dan por sentado sus sacrificios. Se enojan si se ignoran sus solicitudes de ayuda. Algunos cuidadores en estas situaciones sienten que están justificados al enfrentarse directamente a las personas que los han decepcionado para intentar que cambien; declaran que darán por terminada la relación con estos amigos y familiares si no hacen su parte. Otros cuidadores tratan de aceptar las limitaciones de los demás e ignoran la decepción. Pero ellos también pueden terminar sintiéndose abandonados y resentidos.
¿Cómo deben responder los cuidadores cuando no se cumplen sus expectativas? La respuesta correcta varía de un cuidador a otro dependiendo de muchos factores, entre ellos la personalidad del cuidador, el estilo interpersonal y las relaciones que tienen con las personas que los han decepcionado. Ninguna respuesta es perfecta; cada una tiene sus ventajas y desventajas. Estas son algunas cosas que debes tener en cuenta al decidir cómo debes responder a las decepciones como cuidador:
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