Vida Sana
Cuando los adultos mayores tienen problemas de memoria, falta de concentración, confusión o un ser querido con esos síntomas, es natural que se preocupen por la posibilidad de tener demencia o la enfermedad de Alzheimer. Una encuesta reciente de AARP encontró que casi la mitad de los adultos mayores de 40 años piensan que desarrollarán demencia, una proporción mucho mayor que la prevalencia real de la enfermedad.
Sin embargo, existen otros trastornos tratables que pueden producir síntomas similares y que los médicos pueden pasar por alto con facilidad, señala el Dr. Ardeshir Hashmi, geriatra y jefe de sección del Centro de Medicina Geriátrica de Cleveland Clinic.
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“A veces se hace solo un examen muy superficial y luego [el médico dice]: ‘Aquí tienes una pastilla para la enfermedad de Alzheimer’”, explica Hashmi. (Aunque no existe una cura para la enfermedad de Alzheimer, el tipo más común de demencia, hay varios medicamentos aprobados por el Gobierno federal que pueden ayudar a controlar sus síntomas. Dos medicamentos han llegado al mercado que podrían ralentizar la progresión de la enfermedad de Alzheimer, aunque los estudios que miden su eficacia están en curso). “Antes de llegar a esa conclusión, debes descartar todas las demás enfermedades que pueden confundirse con la demencia, que son fácilmente reversibles”.
Estos son algunos trastornos comunes que pueden confundirse con la demencia.
1. Interacciones entre medicamentos o efectos secundarios
Hashmi explica que cuando alguien manifiesta tener problemas de memoria, lo primero que le pregunta es siempre: “¿Comenzó a tomar un nuevo medicamento recientemente?”.
Los adultos mayores tienen más probabilidades que los jóvenes de presentar un deterioro cognitivo como efecto secundario de un medicamento, y la toxicidad de los fármacos es la causa de hasta el 12% de los casos de sospecha de demencia, según demuestran las investigaciones.
Existen muchos tipos de medicamentos recetados y de venta libre que pueden afectar la cognición, pero los más comunes son los indicados para el sueño, la incontinencia urinaria, el dolor, la ansiedad y las alergias. Tomar demasiados medicamentos (conocido como polifarmacia) puede afectar tu capacidad de pensar con claridad y recordar cosas, dice Hashmi.
Un informe (en inglés) de abril del 2023 de la Encuesta nacional sobre el envejecimiento encontró que el 82% de los adultos de entre 50 y 80 años toman al menos un medicamento recetado; el 28% toman cinco o más medicamentos. El mismo informe encontró que el 80% de los adultos mayores que toman medicamentos recetados dijeron que estarían dispuestos a dejar de tomar uno o más si su médico indicara que es posible.
La confusión puede surgir incluso a raíz de un medicamento recetado que se ha tomado durante muchos años. Hashmi explica que esto se debe a que con la edad, los riñones y el hígado se vuelven menos eficaces a la hora de eliminar los fármacos del organismo, por lo que los medicamentos se pueden acumular con el tiempo y causar problemas.
2. Infecciones respiratorias (incluso COVID-19)
Según Hashmi, toda infección que no se trate puede causar delirio, que consiste en un cambio repentino en el estado de alerta, la atención, la memoria y la orientación, y que puede parecerse a la demencia. Cuando se produce una infección, los glóbulos blancos se dirigen al foco infeccioso y provocan un cambio químico en el cerebro que hace que algunos adultos mayores se sientan somnolientos, desconcentrados o confundidos.
Hashmi explica que en las personas de 65 años o más, es más difícil diagnosticar las infecciones respiratorias debido a que es más probable que no tengan los síntomas clásicos, como fiebre o tos. En un estudio publicado en el 2020 en JAMA Network Open (en inglés), el 37% de los pacientes mayores infectados por COVID-19 que acudieron a la sala de emergencias con delirio no presentaban los síntomas típicos de esta enfermedad, como fiebre o dificultad para respirar.
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