Vida Sana
Mito: Solo afectan a las mujeres
Eso es falso, las enfermedades de la tiroides afectan tanto a hombres como a mujeres. Si bien es cierto que tanto la disminución en la función de la glándula (hipotiroidismo), como el aumento de su función (hipertiroidismo) son 10 veces más frecuentes en la mujer, pueden también afectar a los varones. Probablemente el mito nace porque los problemas relacionados a la tiroides afectan ocho veces más a las mujeres que a los hombres.
Mito: Solo afectan a las personas mayores
Eso no es cierto, las enfermedades de la tiroides pueden afectar a bebés recién nacidos (hipotiroidismo congénito), a niños, adolescentes, adultos y ancianos. Lo que sí es cierto es que el riesgo de padecer de enfermedades de la tiroides aumenta con la edad. Se calcula que el 20% de mujeres mayores de 60 años tiene alguna forma de enfermedad de la tiroides y que tanto el hipertiroidismo como el hipotiroidismo son mas frecuentes en mujeres de esa edad.
Mito: Son fáciles de diagnosticar y tratar
Falso. Dependiendo del tipo de enfermedad y debido a la ausencia de síntomas confiables, las enfermedades de la tiroides pueden ser muy difíciles de descubrir, especialmente en las personas mayores. Por ejemplo, los llamados hipotiroidismo e hipertiroidismo subclínicos (o sea sin síntomas) pueden no ser diagnosticados si el médico no tiene un alto nivel de sospecha. Igualmente, los tumores o nódulos de la tiroides pueden ser difíciles de palpar y requieren un alto índice de sospecha.
Mito: No necesitan ser tratadas
Nada mas falso que esto. Sin un tratamiento adecuado, las enfermedades de la tiroides pueden afectar gravemente la calidad de vida de quienes la padecen. Muchos casos de sobrepeso y obesidad, depresión, problemas con el colesterol, trastornos menstruales, infertilidad, ansiedad y baja de peso, pueden ser producto de enfermedades tiroideas no reconocidas y tratadas. Algunos nódulos tiroideos pueden ser cancerosos y pueden causar serias complicaciones si no reciben tratamiento.
Mito: Siempre ocasionan bocio o crecimiento de la glándula
También es falso. Este mito probablemente nazca del hecho de que el bocio o crecimiento de la glándula tiroides es más común en zonas geográficas del planeta donde el agua que consumen sus habitantes no tiene suficiente yodo. Pero la mayoría de padecimientos de la tiroides se presentan sin crecimiento de la glándula. Otro mito es que el bocio provoca una mala función de la glándula, y eso no es cierto. De hecho, por lo general, el bocio no altera la función normal de la glándula.
Mito: Todo bulto o nódulo en la tiroides es canceroso
Eso es falso; de hecho, menos del 5% de los nódulos tiroideos son cancerosos y ninguno de ellos duele cuando esta creciendo. Los nódulos son pequeñas formaciones que crecen dentro de la glándula y que pueden ser sólidas o quísticas (bolitas con contenido líquido). Son tan difíciles de diagnosticar que la mayoría de ellos no son reconocidos por los médicos y muchas veces son encontrados de casualidad por la propia persona al tocarse casualmente el cuello.