Vida Sana
El mayor complejo mundial de dunas de arena de cristales de yeso cubre más de 275 millas cuadradas en el sur de Nuevo México, y el Parque Nacional White Sands National Park (en inglés) es el núcleo de este extraordinario panorama. Las llanuras expuestas de este parque de 145,000 acres están cubiertas de grandes franjas blancas, y en la distancia se alzan las escarpadas montañas. Cuando la luz matinal produce sombras que añaden más dimensión a las dunas, es posible desorientarse en las interminables ondulaciones. Bajo el fulgurante sol del mediodía, cuando te sientas en la cima de una duna de 60 pies y el viento arrecia, puedes sentir que estás a la deriva en un gran mar blanquecino mientras la arena te salpica la cara como el rocío de sal del océano. Es un espacio mágico y una verdadera maravilla natural. White Sands había sido designado monumento nacional, pero en el 2019 se volvió a designar como parque nacional, y es uno de los miembros más nuevos del sistema del Servicio de Parques Nacionales.
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Las arenas se forman después de que la playa del extremo occidental del parque —que tiene un contenido mineral muy alto— se llena de agua. Cuando el agua se evapora, los minerales forman depósitos de yeso que el viento arrastra hasta convertirlos en dunas de arena blanca, como si la brisa del mar esculpiera una playa. El parque alberga cerca del 40% del complejo de dunas de yeso, y el resto se encuentran en el contiguo Polígono de Misiles de White Sands, que está bajo control militar y restringido al público.
Datos sobre el parque
Ubicación: cerca de Alamogordo, Nuevo México
Superficie: más de 145,000 acres
Elevación más alta: 4,116 pies sobre el nivel del mar (la más baja: 3,887 pies)
Cantidad de millas y senderos: 9 millas a lo largo de cinco senderos
Atracción principal: las dunas de arena de yeso
Costo: $25 por vehículo por un permiso de siete días
Mejor forma de verlo: a pie, recorriendo uno de los tantos senderos cortos que atraviesan las dunas mientras sale el sol
Cuándo ir: otoño (septiembre y octubre) o primavera (de abril a principios de junio), cuando el calor del verano no es excesivo y las temperaturas nocturnas no descienden por debajo del punto de congelación, como puede ocurrir en invierno
Este es el extremo norte del desierto de Chihuahua, y las desiertas montañas de Sacramento se elevan vertiginosamente sobre la cuenca de Tularosa. Sin embargo, lejos de ser estéril, el parque está lleno de vida. Hasta la misma arena cambia constantemente, ya que las inmensas dunas se desplazan más de 30 pies al año debido a los vientos que las transforman. El parque también alberga diversas especies que incluyen más de 250 aves, 50 mamíferos, 30 reptiles e incluso un pez. En White Sands hay al menos 45 especies endémicas, como el ratón de abazones de pradera y la lagartija blanca sin orejas. En verano, casi todos los animales son nocturnos debido al calor, pero es posible ver al parque cobrar vida a la luz del amanecer y justo antes de la puesta de sol. Por cierto, con frecuencia resulta sorprendente la plenitud de vida que habita en esta zona del desierto de Chihuahua.
No cabe duda de que las dunas de cristales de yeso son la atracción principal, y ofrecen magníficas oportunidades para tomar fotografías, sobre todo durante las horas áureas justo después del amanecer y antes de la puesta de sol. La temporada alta para los casi 800,000 visitantes anuales del parque es de marzo a junio, pero incluso en ese momento no parece estar tan concurrido. Además, casi todos los visitantes tienden a mantenerse en una ruta de 8 millas que atraviesa el parque llamada Dunes Drive, de modo que puedes evitarlos fácilmente si te estacionas y recorres un sendero.
El Parque Nacional White Sands se encuentra en una zona remota del estado, por lo que es necesario conducir bastantes horas para llegar, sin importar de dónde vengas. Sin embargo, esta parte del oeste parece destinada a largos viajes en automóvil, que pasan rápidamente gracias a los extensos territorios.
El parque suele cerrar a las 8 p.m. en primavera y verano (a las 6 p.m. en invierno), pero desde mayo hasta octubre, cuando hay luna llena, permanece abierto unas horas más para que los visitantes puedan disfrutar del espectáculo, que realmente es un espectáculo. La luna llena ilumina la arena blanca, que a su vez devuelve la luz al cielo nocturno y crea una atmósfera casi fantasmal. Es una experiencia que vale la pena y que no olvidarás fácilmente.
Planea tu visita
El Paso, Texas, es la ciudad más cercana que cuenta con un aeropuerto internacional, y se encuentra a 98 millas al sur del parque por la autopista 70, que es la carretera principal para llegar a White Sands. Albuquerque, Nuevo México, se encuentra a 223 millas al norte. Ambas opciones son un buen punto de partida para realizar un viaje por carretera en el que podrás explorar el sur de Nuevo México. Este recorrido podría incluir paradas en las ciudades de Las Cruces y Roswell e incluso una visita al Parque Nacional Carlsbad Caverns, a unas 180 millas al sureste de White Sands.
En verano, las temperaturas en esta región del desierto de Chihuahua pueden superar los 100 grados, y en invierno pueden descender por debajo del punto de congelación. Es por eso que la primavera, el principio del verano y el otoño son las mejores épocas para visitarlo, ya que las temperaturas del mediodía suelen rondar los 80 grados, y las mínimas, los 50. Si planeas hacer senderismo, lleva capas de ropa para todo tipo de temperatura, ya que las condiciones pueden cambiar radicalmente.
Los baños y las comodidades para los visitantes son limitados. La única entrada del parque tiene un centro de visitantes con una tienda de regalos que ofrece algunos alimentos básicos (prácticamente es un minimercado), pero ese es el único lugar del parque que ofrece servicios. Por lo tanto, lleva bocadillos y mucha agua, sin importar la época del año en que visites el parque. Una mejor idea es llevar un pícnic completo, ya que hay tres áreas de pícnic con mesas a la sombra (y baños cerca) dentro del parque. Encontrarás baños en el centro de visitantes y a lo largo de la carretera Dunes Drive, y uno de los únicos baños con acceso para personas discapacitadas se encuentra en Interdune Boardwalk, junto a la carretera principal, justo antes de que se acabe el pavimento de Dunes Drive.
En el Parque Nacional White Sands no hay señal de wifi y la recepción de telefonía móvil es muy limitada, así que planea recorrer el parque con mapas impresos o los que tengas guardados en tu dispositivo. El Polígono de Misiles de White Sands sigue siendo una base militar activa, y uno de los curiosos encantos de visitar la zona es tener que esperar en la autopista 70 cuando se realiza un simulacro. Los cierres de carretera casi nunca duran más de una hora —aunque pueden durar hasta tres—, pero eso puede alterar el ritmo de un viaje si, por ejemplo, tienes previsto volver a Las Cruces para cenar. (Consulta el sitio web del parque para informarte sobre los cierres de las carreteras).
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