Sopa seca

Si tengo un plato preferido, es este. Me hace volver a mi niñez. Es mi comida con sabor hogareño y, por ende, la de mis hijos.

Ingredientes

• 1 tomate grande
• 1 chile jalapeño grande
• 1 cebolla pequeña, cortada en trozos grandes
• 1 diente de ajo grande
• 6 ramitas de cilantro
• 1/4 taza de aceite vegetal
• 1 paquete de 7 onzas de fidelini u otra pasta pequeña, como pepitas (semillas de melón) o letras
• 2 tazas de caldo de pollo o agua

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Preparación

1. Caliente una plancha o sartén pesada de hierro fundido a fuego medio bajo hasta que una gota de agua, al hacer contacto con ella, salte y se evapore.
   
2. Agregue el tomate y el jalapeño, y cocine, revolviendo frecuentemente, unos 15 minutos, hasta que la piel del tomate y del chile estén ennegrecidas y con burbujas.
   
3. Retire el tomate y colóquelo en un tazón para reservar el jugo.
   
4. Coloque el chile en una bolsa pequeña de plástico o de papel y deje reposar 10 minutos. Cuando se haya enfriado lo suficiente como para manipularlo, quite la piel quemada. Las partes diminutas ennegrecidas que puedan quedar le darán más sabor. Asegúrese de no tirar el delicioso jugo.
5. Coloque el tomate, la cebolla, el ajo, el cilantro y el jalapeño en una licuadora o procesadora de alimentos, y procese hasta que logre una mezcla casi homogénea, alrededor de 1 minuto. Reserve. 
6. Coloque el aceite en una olla de hierro fundido con tapa (horno holandés) o una cacerola mediana; caliente a fuego medio alto hasta que el aceite comience a agitarse. Agregue la pasta y cocine, revolviendo constantemente, hasta que se doren. Retire todo excepto 2 cucharadas del aceite. Agregue la mezcla procesada de tomate y cocine, revolviendo con frecuencia, por 2 minutos. Reduzca el fuego a bajo; agregue el caldo de pollo y hierva a fuego lento. Tape el horno holandés y cocine por 20 minutos o hasta que el líquido se absorba.
7. Se puede servir con queso parmesano rallado y salsa pico de gallo.