CDC: dos mascarillas protegen más que una

Una división de los CDC que supervisa los dispositivos médicos está trabajando para desarrollar estándares de filtración que permitirán que las mascarillas incluyan una etiqueta que muestre qué tan bien bloquean las partículas infecciosas. Se espera que ese trabajo se complete para abril, dijo un portavoz.

Además, algunos científicos en EE.UU. están haciendo un llamado al Gobierno federal para que intensifique la producción de mascarillas de grado médico y que aumente su disponibilidad.

Cómo crear una mejor mascarilla

Por ahora, los CDC y expertos en enfermedades infecciosas dicen que todavía puedes obtener excelentes resultados de las mascarillas de tela y las quirúrgicas no médicas que están ampliamente disponibles. Para conseguir un alto nivel de protección, ofrecen las siguientes sugerencias:

Usa una mascarilla desechable debajo de tu mascarilla de tela favorita

Empieza con usar dos mascarillas. Los investigadores de los CDC descubrieron que el uso de una sola mascarilla —ya sea de tela o de calidad quirúrgica— impidió el paso de solo entre 42% y 44% de las partículas producidas por una tos simulada.  Sin embargo, cuando se colocó una mascarilla de tela por encima de la mascarilla quirúrgica, se bloquearon el 92.5% de las partículas emitidas con la tos.

La mayoría de las mascarillas desechables que existen en el mercado de consumo no son de grado médico, pero están hechas de polipropileno, una tela no tejida que repele electroestáticamente las partículas virales. Es decir, estas mascarillas aun así dan buenos resultados a la hora de impedir el paso del virus, dice Marr. El problema es que, al no usarse ajustadas, por las aberturas pueden entrar y salir partículas virales cuando se usan solas.

"Por sí solas, las mascarillas quirúrgicas no funcionan bien porque están muy abiertas por los lados", dice Marr. "Si te pones una mascarilla de tela bien ajustada sobre esa, ayudará a sostenerla y reduce las aberturas para mejorar el ajuste".

Los CDC no recomiendan usar dos mascarillas desechables colocadas una encima de la otra porque "no están diseñadas para ajustarse con precisión, y al usar más de una no se logra un mejor ajuste".

Usa una mascarilla de tela tejida densamente con un filtro en medio

Una mascarilla de tela que quede bien ajustada y tenga un filtro puede bloquear del 74% al 90% de las partículas infecciosas, revela el estudio de Marr. Agregar un filtro no tejido es importante porque puede ayudar a atrapar los aerosoles diminutos que se atraviesan por el tejido incluso en las telas con tejido apretado.

Puedes comprar un filtro HEPA especial diseñado para colocarse en una mascarilla con portafiltro, o corta un trozo de una bolsa de aspiradora. Varios estudios de investigación que examinan la eficacia de las mascarillas han descubierto que las bolsas de aspiradora están entre los mejores materiales para atrapar partículas diminutas.

"Empieza con dos capas de tela tejida apretada, intercala el trozo de una bolsa genérica sencilla de aspiradora y tendrás un gran bloqueador con la eficacia cercana a la de una mascarilla N95", dice Gandhi.

Asegura el buen ajuste

Los CDC ofrecen las siguientes recomendaciones para lograr un mejor ajuste de la mascarilla:

• Elige una mascarilla que cuente con alambre para el ajuste contra la nariz, lo cual impide que se escape el aire por la parte superior de la mascarilla. Dobla el alambre hasta lograr un ajuste preciso contra la cara.

• Usa un ajustador o soporte de mascarilla encima de una mascarilla desechable o de tela para impedir que se escape el aire por las orillas. Estos pequeños dispositivos reutilizables permiten lograr un ajuste preciso de la mascarilla contra la cara y pueden aumentar la eficiencia de filtración de la mascarilla quirúrgica a aproximadamente el 80%, de acuerdo con una investigación publicada el 10 de diciembre en la revista JAMA Internal Medicine (en inglés).

• Asegura el buen ajuste de la mascarilla sobre la nariz, la boca y la barbilla. "Si la mascarilla está bien ajustada, sentirás que el aire cálido entra por la parte frontal de la mascarilla, y posiblemente notarás que el material de la mascarilla se mueve hacia adentro y hacia afuera cada vez que respiras", señalan los CDC.

• Si usas una mascarilla desechable, ata las tiras en el punto donde se unen al borde de la mascarilla, y luego dobla y mete hacia adentro el material sobrante. Los CDC ofrecen un enlace a un video en que se explican estas instrucciones: https://youtu.be/UANi8Cc71A0 (en inglés).

Considera usar una mascarilla KN95

Al igual que las mascarillas N95, se supone que las mascarillas KN95 atrapen al menos el 95% de las partículas que miden 0.3 micrómetros. La única diferencia es que las KN95 están fabricadas para cumplir con las normas de China, en vez de las de Estados Unidos.

Fue difícil para los consumidores encontrar las KN95 a principios de la pandemia porque los proveedores de atención médica las estaban comprando, pero están apareciendo cada vez más en los estantes de tiendas donde los compradores ordinarios las pueden comprar. Marr dijo que pueden ser una buena opción; siempre y cuando adquieras la versión real.

Un estudio en septiembre del ECRI, un grupo sin fines de lucro que evalúa la tecnología médica, encontró que hasta el 70% de las mascarillas KN95 que se estaban vendiendo en Estados Unidos eran falsas.

Las autoridades de salud de EE.UU. han empezado a someter a prueba las mascarillas. Los CDC publican una lista de las marcas que cumplieron y las que no cumplieron con sus estándares (en inglés) en pruebas por lotes. Es recomendable revisar la lista antes de hacer alguna compra.

En una declaración, una portavoz de los CDC dijo que incluso esas mascarillas KN95 que no pasan la prueba para servir como mascarillas de grado médico "se espera que proporcionen control de origen (es decir, proteger a otros) similar o mejor que las bragas de cuello, las mascarillas caseras y la mayoría de las mascarillas no reguladas".

Los CDC recomiendan no usar una segunda mascarilla si usas la KN95. Es decir, usa solo una mascarilla KN95 a la vez. 

Michelle Crouch es una escritora que ha cubierto temas de salud y finanzas personales para algunas de las publicaciones más importantes del país. Su trabajo ha aparecido en Reader's Digest, Real Simple, Prevention, The Washington Post y The New York Times.