Vida Sana
Con los recientes retiros de frutas congeladas debido a preocupaciones de contaminación, muchos consumidores se preguntan si es seguro comer frutas congeladas. En general, comer fruta cruda —fresca o congelada— presenta riesgos intrínsecos porque no se ha cocinado ni calentado, algo que mata la mayoría de los patógenos alimentarios.
“No tenemos ninguna manera eficaz de protegernos”, dice Francisco Diez-Gonzalez, director del Center for Food Safety de la Universidad de Georgia. “El único paso al que están sujetas las frutas y verduras frescas es [...], dependiendo del origen del producto”.
¡ÚLTIMA OPORTUNIDAD! - Únete a AARP a precios del 2024; las tarifas aumentan en el 2025.
Obtén acceso inmediato a productos exclusivos para socios y cientos de descuentos, una segunda membresía gratis y una suscripción a AARP The Magazine.
Únete a AARP
Durante el último mes, docenas de productos de frutas congeladas han sido retirados del mercado en todo el país debido a dos eventos de contaminación distintos. Uno de ellos fue una posible contaminación por listeria en las piñas. El otro, anunciado por primera vez en marzo, tuvo que ver con un brote de hepatitis A relacionado con las fresas orgánicas congeladas.
La fruta congelada frente a la fruta fresca
“Si el producto agrícola está contaminado, ¿cuál es mejor: congelado o fresco? Ninguno es mejor”, dice Gina Nicholson Kramer, directora adjunta del Center for Foodborne Illness Research and Prevention de la Universidad Estatal de Ohio.
Este año no ha habido retiros extendidos de frutas frescas.
A diferencia de las verduras congeladas que vienen con instrucciones específicas de cocción, las frutas congeladas no tienen esas pautas. Como resultado, los consumidores pueden suponer que la fruta congelada se puede comer sin cocinar, dijo.
“Por lo general, los fabricantes de frutas congeladas son muy buenos para asegurarse de que el producto pase por un lavado especial para eliminar los patógenos alimentarios que podrían estar en el producto”, dice Kramer, “pero, lamentablemente, los sistemas de lavado para eliminar los patógenos no funcionan en un 100%”.
Posibles fuentes de contaminación
En el caso de las fresas congeladas contaminadas, Diez-Gonzalez teoriza que el responsable fue un trabajador agrícola, en lugar de factores ambientales. Esto se debe a que la hepatitis no suele estar presente en el medio ambiente.
“Generalmente, no hay muchas personas que hacen pruebas para detectar la presencia de hepatitis en los alimentos. Lo más probable es que alguien se enfermó”, dice.
Cuando los fabricantes no pueden identificar las cajas o los campos exactos afectados por la contaminación, eligen retirar toda la línea de producción como una medida de precaución para evitar que más personas se enfermen.
También te puede interesar
Seguridad alimentaria al usar aplicaciones de entrega
Uber Eats, DoorDash e Instacart son convenientes, pero aun así requieren medidas de seguridad.
¿Un apagón?
Te explicamos cuánto tiempo duran los alimentos en el refrigerador y el congelador
¿Cuánto sabes sobre la intoxicación alimentaria?
Con este cuestionario aprenderás, entre otras cosas, por qué los adultos mayores tienen un riesgo mayor de enfermarse.