Vida Sana
Puede que el invierno sea la temporada de hibernación para algunas especies, pero para los humanos que disfrutan de la naturaleza y de los viajes, puede ser una temporada de aventura y diversión.
Crees que estamos evitando el problema obvio: hará frío, ¿verdad? Relájate: si hace tiempo que no vas a una tienda de artículos para actividades al aire libre, tal vez no te hayas dado cuenta de lo mucho que hemos avanzado en cuanto a ropa de invierno, que ahora es cálida, cómoda y sorprendentemente poco voluminosa. Otra ventaja es que los viajes en invierno rara vez están abarrotados o son apresurados. Y esta es la mejor parte: no hace falta saber cómo bajar una montaña a toda velocidad para disfrutar del aire libre en el norte.
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Caminata con raquetas de nieve en Vermont
El primer paso siempre es el más problemático. Pero en cuanto aprendes (lo cual sucederá rápidamente, al segundo o tercer paso), las raquetas de nieve abren un mundo nuevo de paisajes cubiertos de nieve que puedes explorar. “El bosque es tranquilo, silencioso y hermoso”, dice Vicky Vautour, de 70 años, residente de Vermont y ávida caminante con raquetas de nieve. “No tienes que esperar en colas, ni en senderos concurridos, ni en el frío”. Caminar con raquetas de nieve genera calor corporal, gracias al esfuerzo aeróbico, pero puede ser una actividad de ritmo lento y no tan rigurosa.
Diversión de invierno
Raquetas de nieve
Paseos en trineo
Aguas termales
Trineos tirados por perros
Pesca en hielo
Ir de safari
La mayoría de las estaciones de esquí y los centros nórdicos, como Smugglers' Notch Resort en Vermont, alquilan raquetas de nieve y ofrecen clases o excursiones guiadas. El uso de los bastones de esquí puede reforzar el equilibrio, y caminar en raquetas de nieve abre el apetito, así que lleva bocadillos y agua. Como este tipo de caminata puede ser una actividad tranquila y suave, es menos probable que asustes a los animales, dice Vautour. “Cuando voy con mis nietos, me encanta mostrarles las maravillas del mundo de la naturaleza”.
CUANDO ESTÉS AHÍ: Cold Hollow Cider Mill, en el cercano Waterbury Center, concentra el encanto rústico de Vermont. Explora la prensa de sidra en activo y come una dona de sidra fresca antes de curiosear productos de Nueva Inglaterra en las estanterías de madera.
DÓNDE MÁS: puedes caminar con raquetas de nieve en casi cualquier lugar donde la capa de nieve sea profunda. Para encontrar senderos establecidos, busca “Nordic ski areas” (zonas de esquí nórdico) en internet. A menudo son adyacentes a las estaciones de esquí alpino. O alquila el equipo en una tienda y pídele al empleado que te recomiende senderos escénicos para raquetas de nieve.
CUÁNTO CUESTA: por lo general, el precio de las clases empieza en $45 por persona.
MARAVILLA INVERNAL: se cree que las raquetas de nieve se inventaron en el año 4000 a.C. en Asia Central.
Paseos en trineo en Idaho y Colorado
Con una altura de 16 o 17 manos (es decir, unos cinco pies y medio), los caballos de tiro de las razas percherón, clydesdale y belga enganchados a un trineo abierto deleitan a los pasajeros que acarician sus suaves hocicos de terciopelo. Los trineos son de madera, con asientos acojinados y cálidas mantas de lana. La mejor parte de los paseos en trineo en invierno llega cuando la belleza y la fuerza de los caballos funcionan en sincronía con el trineo, y te encuentras paseando por un valle cubierto de nieve a 3 o 4 mph. “Es simplemente mágico”, dice Calvin Chatfield, de 67 años, director de Ios establos del Sun Valley Resort de Idaho (en inglés). “Al anochecer, en una bonita noche despejada, miras hacia arriba y hay más estrellas de las que te puedes imaginar”.
En Keystone Stables (en inglés), en Colorado, los paseos en trineo bordean el arroyo Soda Creek hasta llegar a una granja restaurada que figura en el Registro Nacional de Lugares Históricos. Se sirve sidra caliente en los paseos panorámicos, y se organizan cenas de tres platos dentro de las acogedoras cabañas. La adiestradora de caballos Sandy Ryan, de 64 años, lleva una década conduciendo trineos. “Estos gentiles gigantes”, dice, “nos alejan del ritmo de nuestras vidas atareadas”.
CUANDO ESTÉS AHÍ: date una vuelta por Sun Valley, uno de los destinos favoritos de Ernest Hemingway. A los bibliófilos les encantará visitar su repertorio de bares preferidos, ojear la colección de Hemingway en la biblioteca Community Library y visitar su monumento conmemorativo.
DÓNDE MÁS: además de las zonas montañosas del oeste, puedes disfrutar paseos en trineo en Nueva Inglaterra, el noroeste del Pacífico y el norte del estado de Nueva York.
CUÁNTO CUESTA: las tarifas por lo general comienzan a partir de unos $60 por persona.
MARAVILLA INVERNAL: los cascabeles se utilizan a menudo como ambientación, pero cuando los trineos eran el transporte habitual, los cascabeles servían como sistema de alerta para los peatones.
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