Viaja a Estambul a través de su gastronomía

Viajar a Estambul es entregarse a una aventura culinaria sazonada con miles de años de historia. La capital turca, antiguamente conocida como Constantinopla, es famosa por su aromático café, sus sazonados kebabs y su rahat lokum o delicia turca, un tipo de caramelo blando relleno de almíbar. Pero hay mucho más por descubrir.

En la mesa turca abundan los vegetales, la carne de cordero, los mariscos y los quesos frescos; también, las nueces, las frutas y las hierbas. Es el balance perfecto de un estilo de vida mediterráneo influenciado por la cultura árabe, turca y asiática. Sin duda, es el resultado de una ubicación geográfica bendecida; Estambul es el punto de encuentro entre el continente europeo y el asiático.

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Un arco iris de vegetales se sirve en cada plato. Los pepinos, los tomates, las olivas, los pistachos, las cerezas, las granadas, y las hierbas frescas son los protagonistas de las recetas, desde el desayuno hasta la cena. Estos son sazonados con abundante aceite de oliva extra virgen; mientras, especias como las semillas de ajonjolí, el comino, la menta, el orégano y los pimientos molidos los perfuman.

Si deseas viajar a Estambul a través de la comida, deleita tu paladar con estos platos inspirados en mi viaje a la capital turca.

Ensalada de berenjena y yogur

En Turquía el yogur se disfruta en abundancia. Comúnmente se sirve como una salsa para acompañar la comida o se puede utilizar en la elaboración de platos como esta ensalada de berenjena a la parrilla. Cómela con pan o sírvela como un acompañante para las carnes.

Rinde 4 porciones

INGREDIENTES

• 2 libras de berenjena (1 berenjena grande o dos pequeñas)
• 1 taza de yogur blanco (sin azúcar)
• 1 diente de ajo triturado finamente
• 1 cucharadita de menta seca
• 1 cucharadita de jugo de limón fresco (limón amarillo)
• 1 cucharada de aceite de oliva extra virgen
• Sal y pimienta negra a gusto

PREPARACIÓN

1. Precalienta el horno a 375°F.

2. Lava la berenjena y perfora la piel con un tenedor. Envuelve en papel de aluminio y hornea por 45 minutos o hasta que al insertar un cuchillo la sientas completamente tierna. Sácala del horno y déjala enfriar.

3. En un bol pequeño combina el yogur con el ajo triturado, el jugo de limón fresco y la menta seca. Mézclalos bien.

4. Cuando la berenjena se haya enfriado utiliza un cuchillo para hacer un corte vertical y abrirla. Usa una cuchara para eliminar las semillas del interior.

5. Corta la berenjena en trozos. Combínala con el yogur y sazónala con sal y pimienta al gusto. Refrigérala al menos una hora para que los sabores se incorporen bien.

6. Decórala con aceita de oliva extra virgen. Sírvela de inmediato.