Vida Sana
Llega el fin de año y también el deseo de formular nuestros deseos para el próximo. Mientras que para algunas personas eventos como cambiar de empleo, comprar un auto nuevo, dejar de fumar, o ir de viaje a otro país son metas a lograr, el nuevo año para los que cuidan de sus seres queridos puede significar enfocarse en aspectos personales gratificantes y beneficiosos. Para que en el nuevo año podamos continuar cuidando con amor a nuestros seres queridos, comparto 10 propósitos. Escoge en cuáles quieres enfocarte:
1. Me amaré más a mí mismo, seré más tolerante conmigo mismo y aprenderé a no sentirme culpable por cuidar de mí mismo. Todos los días haré el esfuerzo de recordar que estoy haciendo un buen trabajo y hago lo mejor que puedo, dando lo mejor de mí a mi ser querido. “Cuidarte es cuidar tu capacidad de producir, de ser feliz, de estar vital, de sentirte vivo, de experimentar la plenitud en todas las esferas de tu vida” (Anónimo).
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2. Me enfocaré en las fortalezas que tiene mi ser querido y no en lo que perdió por la enfermedad. Recordaré que mi ser querido tiene la necesidad de sentirse útil, seguro y amado, y buscaré tareas en las que me pueda ayudar, sin importar qué tan pequeñas sean.
3. Tomaré descansos y buscaré relevo una y otra vez. Practicaré las 10 ‘r’ del relevo sin sentirme culpable porque sé que buscar relevo es una de mis principales responsabilidades. Del relevo depende que me pueda sentir renovado antes de regresar a mis tareas de cuidado.
4. Abriré mi mente para tomar en cuenta sitios, organizaciones y personas que me pueden ayudar. Recordaré que no existe la perfección en el cuidado de otros y que mientras esté seguro mi ser querido, podré recurrir a estas ayudas. Recordaré que pedir y aceptar ayuda no es una debilidad sino una forma de dar el mejor cuidado posible.
5. Cada día lograré sacar de 10 a 15 minutos para mí sin pensar que estoy siendo egoísta. Estos pocos minutos estarán dedicados a practicar ejercicios de respiración, meditar, escuchar música, o simplemente estar mentalmente en un espacio maravilloso y calmado. “Respira” será mi mantra cada vez que sienta que la tensión o el estrés están en mi camino.
6. Actualizaré mis archivos médicos y documentos legales, y los de la persona bajo mi cuidado. A medida que van cambiando las circunstancias de salud y finanzas, se puede necesitar cambios en los documentos que alguna vez fueron establecidos. Por ejemplo, se puede necesitar cambios en el testamento, el poder general, las directivas avanzadas para el equipo de profesionales de la salud que atiende a mi familia, y aun de la persona designada para tomar decisiones médicas.
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Tan simple como meditar, leer, tomar agua… y otras.