Vida Sana
Tres recientes estudios hechos en ratones genéticamente modificados nos han llamado la atención porque vuelven a abrir ese viejo deseo escondido del ser humano de encontrar la fuente de la eterna juventud.
Desde tiempos inmemoriales, el ser humano ha tratado de derrotar el curso natural del envejecimiento, desde las antiguas historias de los alquimistas, hasta el consumo de pócimas mágicas hechas a base de cuernos de rinoceronte, aletas de tiburón y otros menjunjes. El ser humano ha buscado desde siempre alargar su vida y si fuera posible, vivir eternamente…
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Los tres estudios, realizados en Estados Unidos, que comentamos en esta columna tienen que ver con eso: en ellos se demuestra que la sangre o algún factor en la sangre de un ratón joven puede revertir los signos del envejecimiento en un ratón viejo.
La buena noticia
En el primer estudio (en inglés), ratones de una cepa genéticamente manipulada para ser “genéticamente puros”, fueron sometidos a un experimento tipo Frankenstein. Se estudiaron dos ratones, uno muy joven (equivalente a un ser humano de 20 años) y otro mucho mayor. En ambos se cortó parcialmente la piel en forma de un colgajo y luego se cosieron esos colgajos de piel (al ratón viejo se le implantó la piel del ratón joven y viceversa) para permitir que la circulación de la sangre del ratón joven pasara a la del ratón viejo.
Como por arte de magia, los tejidos cerebrales y musculares del ratón viejo se llenaron de células madre y algunas funciones mejoraron en el sentido del rejuvenecimiento.
En los otros dos estudios (en inglés), se inyectó en la sangre de un ratón viejo, en un caso sangre de un ratón joven, y en el otro, una sustancia llamada factor de crecimiento 11 (GDF11) muy abundante en la sangre de ratones jóvenes. En ambos casos se consiguió que el ratón viejo tratado corriera en la cinta sin fin mucho más tiempo y más distancia que el ratón viejo no tratado. Se demostró además que el ratón viejo tratado podía encontrar con mayor rapidez la salida en laberintos especialmente construidos para probar su memoria.
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