Vida Sana
Si pensamos que el mundo es un libro y las personas que no viajan solo leen una página, las que no bucean contemplan desde un solo ángulo algunas de las vistas más maravillosas del planeta.
Cuando te pones una máscara de buceo sobre los ojos, te colocas un regulador en la boca para respirar y desciendes al nivel de la vida marina y los corales, el océano parece simplemente diferente.
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“Convertirse en buceador es más fácil de lo que crees, y mucho más gratificante”, señala Julie Andersen, directora sénior de marca global de la Professional Association of Diving Instructors (PADI), la mayor organización de instrucción de buceo del mundo. “No solo podrás disfrutar de increíbles aventuras en el agua, sino que también te conectarás con una nueva comunidad de amantes del océano”.
Según el grupo, cerca del 10% de las certificaciones de PADI en el 2022 correspondieron a adultos de 50 años o más. Además, desde la pandemia se produjo un aumento del 49% en las certificaciones de adultos del mismo grupo de edad.
Todos los cursos de buceo —ya sean impartidos por PADI o por otra agencia certificadora, como la National Association of Underwater Instructors (NAUI) o Scuba Schools International (SSI)— incluyen asignaturas, la mayoría de las cuales se pueden cursar por eLearning.
Andersen recomienda hacer el curso en casa y luego elegir un destino ideal para concluir la certificación con sesiones de buceo en piscinas (si no las has hecho por medio de un centro local) y en aguas abiertas.
SSI también ofrece una aplicación de aprendizaje digital que está disponible en más de treinta idiomas y permite tomar cursos tanto en línea como fuera de internet, dice Rachael Steidley, coordinadora de mercadeo de SSI.
Todas las personas que toman un curso en aguas abiertas con PADI o SSI deben llenar un formulario médico que contiene preguntas sobre la salud en general y las enfermedades preexistentes, y tiene el fin de verificar que eres un buen candidato para bucear. PADI exige que los candidatos de 45 años o más presenten una nota firmada por un médico que indique que están suficientemente saludables como para bucear.
No hay edad límite para bucear, comenta el Dr. Jim Chimiak, director médico de la Divers Alert Network (DAN), una organización de seguridad para buceadores. Chimiak, de 66 años, recomienda tener en cuenta tu fortaleza y tu aptitud física antes de convertirte en buceador. Se trata de dos cosas distintas, explica.
La fortaleza te permite hacer frente a las exigencias del buceo, y la aptitud física te permite hacer lo que te pedirán que hagas dentro y fuera del agua, explica. Algunas de esas actividades incluyen acarrear el equipo, nadar posiblemente en una corriente y utilizar una escalera para volver a la embarcación después de bucear, si piensas convertirte en un buceador debidamente certificado.
Chimiak explica que si bien puedes bucear aunque no tengas la fortaleza y la aptitud física necesarias para hacer esas y otras actividades, necesitarás que un equipo especializado te ayude con el equipo y otros aspectos logísticos dentro y fuera del agua.
Hacer ejercicio físico con frecuencia y mantener la flexibilidad son buenas formas de enriquecer tu práctica del buceo, dice Cliff Richardson, director ejecutivo y gerente general de NAUI Worldwide. “Muchos buceadores mayores consideran que el yoga y la natación son excelentes actividades para prepararse”, señala.
Los buceadores de todas las edades deben considerar muy en serio todos sus problemas de salud. Entre las posibles contraindicaciones para bucear se incluyen los trastornos convulsivos, las cardiopatías graves, los antecedentes de derrame cerebral, los trastornos musculoesqueléticos o neurológicos graves, el asma, la EPOC y las patologías del oído medio o interno.