Vida Sana
En el sur de Nuevo México, donde las extensas llanuras del desierto de Chihuahua se elevan hasta las laderas de las escarpadas montañas de Guadalupe, se encuentra una de las experiencias más singulares que ofrece el Sistema de Parques Nacionales: el Parque Nacional de las Cavernas de Carlsbad (en inglés). Ahí están unas de las cavernas más grandes, profundas y únicas que se han descubierto, protegidas por el Servicio de Parques Nacionales desde 1923. Hasta que bajas a las profundidades, resulta difícil comprender lo gigantescas que son estas cuevas. El actor Will Rogers describió este sistema de cavernas como el “Gran Cañón con techo”.
La cueva más grande que se ha medido en el parque, la cueva Lechuguilla, abarca más de 140 millas y alcanza una profundidad mayor de 1,600 pies. Solo se permite que entren a esta cueva los investigadores; pero otras de las cuevas que pueden visitarse son muy impresionantes. Big Room es la cueva individual más grande de Norteamérica que puede explorarse, una caverna de caliza de 255 pies de altura. Estalactitas, muchas de hasta 60 pies de largo, “gotean” desde el techo, y estalagmitas espectaculares, algunas de seis pisos de altura, se levantan del suelo. Delicadas formaciones en forma de pajita, estanques de cueva, estructuras centelleantes tipo palomitas de maíz y espeleotemas brillantes contribuyen al espectáculo. “Algunas de las formaciones tienen entre 150 y 200 pies de altura, y al estar ahí mirándolas, parecen todavía más altas”, dice Michael Larson, encargado de información pública y jefe de interpretación de la naturaleza y educación del parque.
Datos sobre el parque
Ubicación: Carlsbad, Nuevo México
Superficie: 46,766 acres
Elevación más alta: 6,368 pies
Millas de senderos: más de 50 millas de senderos rurales
Atracción principal: el sistema subterráneo de cavernas, con 120 cuevas conocidas. Precio: $15 por persona; requiere reservaciones ($1)
Mejor forma de verlo: recorrido guiado por un guardaparques
Cuándo ir: septiembre u octubre, cuando los murciélagos todavía salen volando todas las noches, hace más fresco de día y la temporada pico de turismo ya terminó
En conjunto, las formaciones imparten a este sistema de 120 cavernas conocidas que data de millones de años una sensación barroca y elegante, como si fuera una catedral gótica. A veces, es como desplazarse por otro planeta, y de algunas formas, lo es. El ascensor para visitantes se detiene a 754 pies bajo la superficie de la Tierra. Caminar a esta profundidad, guiado por luces sutiles, es totalmente diferente a cualquier experiencia que hayas tenido en el exterior.
Lo que se encuentra en la superficie también es espectacular. El parque de 46,766 acres está ubicado en el extremo norte del desierto de Chihuahua, con eneldos y pinos piñón en sus zonas de mayor elevación, y praderas en sus esquinas más bajas. Debido a su combinación de zonas ecológicas, el parque está lleno de vida, lo que incluye 750 especies de plantas y 67 mamíferos, que van desde osos negros y ciervos mulos hasta ratones de abazones chihuahuenses. Los mamíferos mejor conocidos del parque son sus 17 especies de murciélago, 3 de las cuales se posan dentro del sistema de cavernas. Sus vuelos llaman tanto la atención que el parque puso asientos de anfiteatro y creó un programa Bat Flight, para que los visitantes puedan observar a los murciélagos con mayor comodidad y hacerles preguntas a guardaparques que además explican el fenómeno.
A diferencia de otros parques nacionales como Yellowstone o Yosemite, puedes disfrutar la mayoría del parque de las cavernas de Carlsbad en un solo día, pero es lo suficientemente diverso para pasar dos o tres días explorándolo.
Planea tu visita
El Parque Nacional de las Cavernas de Carlsbad, a diferencia de la mayoría de los demás parques nacionales, requiere reservaciones por adelantado para ingresar; haz tu reserva antes de llegar, porque no podrás hacer reservaciones en el parque. Las reservaciones cuestan $1, y la entrada está limitada a un período de 60 minutos según la hora que escojas. Por ejemplo, si seleccionaste tu reserva para las 10:30 a.m., solo tienes hasta las 11:30 a.m. para entrar. Al llegar al centro de visitantes, te cobrarán una tarifa de entrada de $15 por persona. Una vez que estés en el parque, puedes permanecer ahí hasta que se cierre ese día.
Debido a lo apartado del parque, es probable que tengas que desviarte para visitarlo —o seleccionarlo como un destino por sí mismo—. Pero el esfuerzo valdrá la pena por la euforia que sentirás al aventurarte hasta sus profundidades. La mayoría de los visitantes llegan desde El Paso, ubicado 149 millas al oeste; otra opción es Albuquerque, 302 millas al noroeste. Aunque queda mucho más lejos, Albuquerque te ofrece la opción de un viaje por carretera para ver algunas de las atracciones más interesantes del sur de Nuevo México, entre ellas la ciudad de Roswell, donde sucedió el incidente del “disco volador” en 1947.