Vida Sana
Trabajar desde casa podría haber parecido interesante y novedoso hace un año. Pero 14 meses después de que la COVID-19 alterara nuestra vida laboral y familiar, la emoción ha desaparecido. Ahora muchos de nosotros estamos enfrentando una pandemia paralela: el agotamiento.
¡ÚLTIMA OPORTUNIDAD! - Únete a AARP a precios del 2024; las tarifas aumentan en el 2025.
Obtén acceso inmediato a productos exclusivos para socios y cientos de descuentos, una segunda membresía gratis y una suscripción a AARP The Magazine.
Únete a AARP
Considera, por ejemplo, a Brett Sonnenschein, de 54 años, un diseñador gráfico para una gran organización sin fines de lucro en la ciudad de Nueva York. Al principio, trabajó bien desde casa. “Fue como una aventura, y nuestra familia es muy unida”, dice refiriéndose a su esposa y sus dos hijos que asisten a la escuela secundaria a distancia. Pero a medida que continúa el calvario de la pandemia, su tono ha cambiado.
“Técnicamente, todo ha funcionado muy bien, pero al final de la jornada laboral estoy físicamente agotado”, dice. “Hay una enorme disminución en mi capacidad mental a medida que avanza el día, y es difícil hacer cualquier trabajo real después de las 3 o 4 de la tarde".
“Desde principios de año, he estado cada vez más agotado, y la línea que separa el trabajo del hogar se ha vuelto cada vez más borrosa”, agrega. “Antes, casi nunca pensaba en el trabajo cuando estaba en casa, y ahora no puedo dejar de hacerlo”.
Según Margaret Wehrenberg, psicóloga clínica en St. Charles, Misuri, y autora de Pandemic Anxiety: Fear, Stress, and Loss in Traumatic Times, Sonnenschein no está solo. “No creo que nadie hubiera podido saber cuán tremendamente agotador y extenuante es estar estresado y angustiado durante tanto tiempo”, dice.
No es un agotamiento común
El estrés del año pasado, crónico e imprevisible, ha creado un tipo completamente diferente de agotamiento, dice Wehrenberg. “A esta altura el año pasado, existía la sensación de que estábamos en esto todos juntos, de que lo íbamos a superar, y la gente miraba videos divertidos en YouTube para darse ánimo”, dice. “Después todos se quedaron sin fuerza, y la línea de llegada continuaba alejándose una y otra vez. Sin un fin a la vista, todos hemos perdido mucha de nuestra energía mental”.
También te puede interesar
Trabajar desde casa: cinco pasos para establecer límites
Cómo separar lo profesional de lo personal cuando tu hogar se convierte en tu oficina.
¿Trabajas desde casa? 7 cambios ergonómicos para tu oficina
Equipos y accesorios que te ayudan a trabajar más cómodamente.Consejos de la Dra. Ruth: mantente positivo para sobrellevar la pandemia
7 ideas para mantenerte mentalmente sano mientras navegas por el regreso a lo "normal".